Operarios contratados por el Gobierno han iniciado ya las obras para acondicionar la cripta en la que se depositarán los restos de Francisco Franco, en el cementerio municipal de El Pardo, al norte de Madrid, tras la exhumación de sus restos, el próximo 10 de junio.

El pasado 11 de mayo, el Estado pasó a ser propietario de la cripta, una concesión anterior de Patrimonio Nacional, tras la publicación de un real decreto del Consejo de Ministros.

Los restos de Arias Navarro y Carrero Blanco

Las instalaciones del cementerio, situado a 50 kilómetro del Valle de los Caídos, donde ahora reposan los restos, están gestionadas por el Ayuntamiento de Madrid. Allí están enterradas personas cercanas a la dictadura franquista, como Carlos Arias Navarro o Luis Carrero Blanco, aunque las hay de todas las ideologías.

La familia de Franco y la Fundación que lleva el nombre del dictador son contrarios a que los restos se depositen en el pequeño cementerio del norte de Madrid y prefieren la cripta de la catedral de la Almudena.

Este miércoles, la Fundación Francisco Franco explicaba en un comunicado los argumentos incluidos en el recurso de la familia remitida al Tribunal Supremo contra la decisión del Gobierno sobre la exhumación.