El fiscal superior de Murcia Manuel López Bernal, que ha sido relevado del caso que investiga al presidente murciano, ha denunciado “intimidaciones” para favorecer a cargos públicos con causas abiertas. Este miércoles se han producido cambios de fiscales que apuntan en esa dirección.

López Bernal ha apuntado, en una entrevista en una cadena de radio, a intereses políticos tras su destitución porque “no se me han explicado las razones por las que se me ha retirado la confianza”. El fiscal ha atribuido su cese en el caso que investiga al presidente murciano porque “la Fiscalía de Murcia ha sido la que más asuntos de corrupción ha sacado de toda España” y “no se nos ha hecho la vida especialmente agradable.

Intimidaciones
Sobre las presiones que él ha estado sufriendo, el fiscal ha explicado que “llama la atención que se haya creado, por ejemplo, una asociación en Madrid con la única finalidad de querellarse contra mí y mi familia, en fechas próximas a mi renovación”.

Según el fiscal, se ha recuperado un viejo tema para ponerle en cuestión. “No puede ser que se me investigue ahora porque hace 32 años corté unos pinos que estaban protegidos en Murcia, y que por eso se presenten querellas, que no tienen otra finalidad que generar mala imagen”.

Robos en casa de otro fiscal

El fiscal superior saliente de Murcia ha añadido que “da mucho que pensar” que a un compañero suyo “le hayan entrado dos veces en su casa delincuentes profesionales, y no con motivo de robos comunes, para llevarse información sensible de la lucha contra la corrupción”.

“Solo se llevaron su ordenador. Ni siquiera se han llevado, para disimular, el dinero que había en casa, como queriendo dejar su tarjeta de visita, dejándole claro el motivo”, ha asegurado López Bernal, que ha añadido que “lo mismo le ha pasado al subdirector de Hacienda que trabaja con nosotros en casos de corrupción”.

Los fiscales están desprotegidos
El fiscal, sin embargo, ha aclarado que esto no ocurre sólo en Murcia. “Sé que en otros sitios también ha habido problemas serios en Alicante. Estas cosas tienen que cambiar”.

López Bernal ha admitido que a los fiscales se les “intimida para que no hagan su trabajo. Esto es así”. Ha asegurado que es algo que ha denunciado en reiteradas ocasiones porque “no puede ser que los perseguidos seamos los fiscales que investigamos la corrupción”.

“La mayoría de los fiscales anticorrupción sienten una cierta desprotección”, ha afirmado López Bernal, que ha lamentado que no se pongan medios para solucionar esta desprotección. “Hemos denunciado a la Fiscalía General del Estado y a la Delegación del Gobierno, pero las investigaciones no salen adelante”.

“No es que la policía no quiera investigar”, ha matizado, “pero tampoco se les da a nuestras denuncias la importancia que realmente tienen”.