El pasado jueves, el Gobierno registró una proposición de ley para gravar los beneficios extraordinarios de la banca y las empresas energéticas, una medida que ha supuesto una gran crítica por parte de la derecha mediática y el empresariado. 

Ante esta posición, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha preguntado "qué intereses están protegiendo" y ha subrayado que "la derecha y la ultraderecha votarán en contra de esta medida y la oposición conservadora se dedica a combatir con ahínco esta medida que es de justicia social".

Asimismo, también. ha cargado contra los dirigentes de entidades financieras y empresas energéticas por sus críticas a los nuevos impuestos planteados por el Gobierno para hacer frente a las consecuencias del impacto de la guerra en Ucrania y la escalada inflacionista. "He escuchado a la señora Botín, al señor Galán... si protestan es que vamos en la buena dirección", ha defendido Sánchez.

Ante el revuelo generado, el diputado del PSC José Zaragoza ha recordado qué clase de comportamiento tiene el PP para con las entidades bancarias. "Cuando los bancos tuvieron problemas pidieron ayuda al gobierno y Rajoy les regaló 63.000 millones de euros. Ahora que los españoles tienen problemas los bancos se quejan de que tengan que pagar impuestos sobre los beneficios extraordinarios que están teniendo. Y el PP con ellos", ha redactado en su cuenta oficial de Twitter.