La amiga íntima del Rey emérito, Corinna Sayn Wittgenstein, ha asegurado que el monarca estuvo en contra del noviazgo de su hijo Felipe con la actual Reina Letizia.

Según ha contado en la entrevista con OK Diario, "los primeros años debieron de ser dificilísimos para ella [Letizia], y ha añadido que tuvo ocasión de "conocerla y me pareció sumamente educada, muy profesional, muy amable y pienso que es de hecho un gran valor para el Rey Felipe y la Monarquía española".

Corinna ha afirmado que durante sus primeros años en el Palacio de la Zarzuela, Letizia tuvo que enfrentarse a un "ambiente completamente hostil". 

"La actividad de Urdangarin era consentida por la Casa Real"

La amiga íntima del Rey Juan Carlos también ha hablado del Iñaki Urdangarin y sus turbios negocios, y ha confirmado que el monarca le pidió que le encontrara un trabajo fuera de España, en 2004.

"Mantuve largas discusiones con Urdangarin para encontrarle un trabajo apropiado, y se lo encontré. Al final decidió rechazarlo porque el aspecto financiero no era tan importante. Para mí estaba claro que se sentía presionado para mantener a su esposa, a la infanta Cristina, con las comodidades y condiciones que los padres de ella esperaban, y él no era más que un deportista y sus medios para lograr tal cosa eran limitados".

Según ha dicho Corinna, está "segura de que la Casa Real estaba bien al tanto de lo que ocurría. También resulta que el CNI estaba copiando los registros informáticos cada mes. Así que me cuesta mucho creer que no supieran lo que estaba pasando".

Corinna ha señalado que intentaron usarla como chivo expiatorio, tras el escándalo de Botswana y para proteger a la Infanta Cristina. "Cuando me di cuenta de que la familia había conspirado para utilizar a una mujer inocente para sustituir a su hija empecé a tener muchísimo miedo. Me di cuenta de que la familia podía ser muy peligrosa, de que en el momento en que su imagen o su situación se viera amenazada, no dudarían en usar sin más a un inocente y en tratar de implicarlo falsamente".

Según ha afirmado, la actividad de Urdangarin en el Instituto Nóos, que presidía y que le llevó a prisión, era "consentida por la Casa Real para que pudiera ofrecer un estatus económico adecuado a su mujer, la infanta Cristina".