Presidenta de honor de la Fundación Nacional Francisco Franco, que tiene como objetivo perpetuar la memoria de su padre, Carmen Franco amasaba una gran fortuna, valorada, según algunos autores, en unos 600 millones de euros, en inmuebles, participaciones en sociedades y cuentas corrientes.

La única hija del dictador, a la que el Rey Juan Carlos concedió el título de duquesa de Franco con Grandeza de España, ha muerto en su domicilio en el número 8 de la calle Hermanos Bécquer, en el barrio madrileño de Salamanca. Se trata de un edificio de estilo señorial del que Carmen Franco era dueña en su totalidad.

Sociedades, locales, plazas de garaje, un palacio
Ese inmueble es la sede dos de las sociedades más importantes del clan Franco, Fiolasa S.A., con activos superiores a los 20 millones de euros y Proazca S.A., que tiene una facturación anual cercana a los 2 millones de euros, según Vanitatis. Otra empresa de la que Carmen Franco era administradora única es Sargo Consulting S.L., que se creó con un capital social de 9,6 millones de euros, ampliado hasta los 11,2 millones, según datos de El Español.

La familia cuenta, además, en la capital con muchos locales comerciales y plazas de garaje. En Madrid también poseían el palacio del Canto del Pico, que servía como segunda residencia a Franco y que la familia vendió en 1988 por 300 millones de pesetas, unos 1,8 millones de euros.

La finca de Romanones
Los Franco conservan al sur de Madrid la finca de Romanones, que el dictador compró a través de una de sus sociedades. El valor actual de la finca es muy alto, ya que una parte de ella fue recalificada. Antes de que estallara la burbuja inmobiliaria, “estaba previsto construir una urbanización de lujo, con un valor incalculable", según recogió en 'Franco confidencial', Pilar Eyre.

Pazo de Meirás
No obstante, la propiedad más popular de los Franco es el Pazo de Meirás, una gran finca señorial que perteneció a la escritora Emilia Pardo Bazán y que sus herederos cedieron al consistorio de la localidad. En 1938 pasó a manos del dictador. El Ayuntamiento reclama su restitución como Bien de Interés Cultural.

El chalé de Marbella
Carmen Franco recibió como regalo tras su boda con el marqués de Villaverde un chalé en la urbanización Los Monteros de Marbella, donde solían veranear con sus hijos cuando no se encontraban en el Pazo de Meirás.

Un libro sobre su padre

En 2008, Carmen Franco sacó a la luz el libro 'Franco, mi padre', una biografía del dictador escrita por los historiadores Jesús Palacios y Stanley George Payne y basada en el testimonio de su hija.

Carmen Franco nació en Oviedo en 1926 y se le asignó el DNI número 3, el más bajo en activo en España en el momento de su muerte (el Rey Juan Carlos posee el número 10).

En julio de 1936, al comienzo del golpe de Estado, su padre ordenó su embarque junto a su madre en el vapor de bandera alemana "Waldi", que las trasladó a Francia. Allí vivió bajo el nombre de María Teresa Martínez-Valdés.

35 años en El Pardo
A su regreso a España vivió en dos palacios, en Salamanca y Burgos, y en octubre de 1939 se instaló en octubre de 1939 en Madrid en el castillo de Viñuelas y después en El Pardo, su residencia desde marzo de 1940 hasta la muerte del dictador, y donde se celebró su matrimonio con Cristóbal Martínez-Bordiú en 1950. El matrimonio tuvo siete hijos.

En 1978 protagonizó un incidente en el aeropuerto de Madrid-Barajas, al ser detenida cuando intentaba llevar a Suiza 38 medallas y condecoraciones de su padre. Le fue impuesta una multa por intento de evasión de objetos de valor histórico.

En diciembre de 1996 entregó a la entonces ministra de Cultura, Esperanza Aguirre, los diarios inéditos del que fuera presidente de la II República española Manuel Azaña, encontrados en la biblioteca de su padre y que quedaron depositados en el Archivo Histórico Nacional.

En 2007, el Ayuntamiento de Sada (A Coruña) solicitó la declaración como Bien de Interés Cultural del Pazo de Meirás, que los Franco siguen conservando en propiedad.