La presidenta de la Comunidad de Madrid se ha esforzado en hacer del Hospital Enfermera Isabel Zendal una fábrica de noticias positivas en favor de su imagen como líder del Ejecutivo regional. Los ordenó construir en contra del criterio de expertos, sanitarios y otros grupos políticos; y desde entonces, lo blande como punta de lanza. Así las cosas, mientras hace anuncios de proyectos faraónicos para este centro, como lo de vacunar las 24 horas del día (algo que por cierto hace meses que dijo); el Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid tiene que poco menos suplicar por continuar suministrando dosis.
Y es que, el Consejo de Salud del Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid aprobó la pasada semana una resolución para exigir a la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid que se replanteara su decisión de no contar con el polideportivo Cerro del Telégrafo como centro de vacunación regional.
Dicho documento, firmado por la totalidad del Consejo con la salvedad de una abstención, reprocha además que la decisión se haya tomado de forma “unilateral” desde el Gobierno de la Comunidad de Madrid.
El consistorio ha trasladado su “profundo malestar por no anteponer criterios sanitarios obligando así a nuestro vecindario y a los de pueblos cercanos a largos desplazamientos en pleno verano”.
Además, el Consejo, formado por parte la gerencia del Hospital del Sureste y los centros de salud ripenses Santa Mónica y La Paz, se solidarizó “con el personal sanitario de los Centros de Atención Primaria” que al parecer de las personas asistentes, si la Comunidad no rectifica, “tendrán que desarrollar esta vacunación con su ya mermado y exhausto personal”.
Un despliegue inútil
El Ayuntamiento de Rivas ya tenía preparado el Polideportivo Cerro del Telégrafo para comenzar a vacunar masivamente a partir del 21 de junio, tal y como solicitó el Gobierno de la Comunidad de Madrid, que pidió este y otros pabellones. Sin embargo, según el alcalde, Pedro del Cura, cuanto tenían todo listo el Gobierno de Ayuso dejó de responder al teléfono y finalmente no se concretará.
El consistorio trabajó desde principios de junio en el acondicionamientos del pabellón, que sa fue utilizado en febrero para la campaña de tests masivos de antígenos. Fue en mayo, cuando la Dirección Asistencial del Sureste de Madrid se puso en contacto con el municipio gobernado por IU, Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos. Del Cura habló con la directora general de Salud Pública, Elena Andradas, para ratificar que Rivas cedía el espacio. Y comenzaron los trabajos, que ya se cifran en unos 23.000 euros sumando material y horas de trabajo; además del perjuicio para los planes deportivos, puesto que toda al actividad que se desarrollaba en el pabellón quedó trastocada.
