La delegada de Cultura en el Ayuntamiento de Madrid, Andrea Levy, ha tenido que ingresar en el hospital por culpa del dolor provocado por la fibromialgia que padece, enfermedad que sufre y que hizo pública durante una entrevista en directo con Risto Mejide en 'Todo es Mentira'. A través de una foto desde la cama de un centro hospitalario, la política del PP ha tratado de explicar en un post de Instagram qué le ha pasado: "Aprender de los días malos de la fibromialgia es todo un reto personal que ayuda a que el resto de la vida pueda ser mejor. Hay momentos en los que nuestro cuerpo nos pide un descanso y se lo hemos de dar", ha expresado.

Asimismo, Levy ha querido mostrar un mensaje motivacional para todo aquel que sufre cualquier tipo de enfermedad: "El dolor, aunque es complicado de sobrellevar, también es una lección de vida. Pide su tiempo, pero no caer en el desánimo. A veces es frustración y por ello hay que poner todas tus energías a tope para superarlo mentalmente, apoyarse en las personas que a nuestro alrededor nos dan cariño y proyectar todo lo que queremos hacer para salir adelante", ha señalado.

¿Qué es la fibromialgia y cuáles son sus síntomas?

Según la RAE, la fibromialgia es una "enfermedad caracterizada por dolor muscular difuso e intenso, rebelde al tratamiento y de causa desconocida". Se trata de una dolencia que provoca fuertes dolores en ligamentos y tendones y que padece entre 2% y el 6% de la población, sobre todo mujeres.

La Fundación Española de Reumatología señala que "la fibromialgia consiste en una anomalía en la percepción del dolor, de manera que se perciben como dolorosos, estímulos que habitualmente no lo son". Además, "puede ocasionar rigidez generalizada, sobre todo al levantarse por las mañanas, y sensación de inflamación mal delimitada en manos y pies y también pueden notarse hormigueos poco definidos que afectan de forma difusa sobre todo a las manos".

Cabe destacar que la fibromialgia no produce secuelas físicas ni puede causar la muerte; sin embargo, puede limitar considerablemente la calidad de vida de quien la sufre. A pesar de que se trata de una enfermedad sin cura definitiva, puede ser controlada con diversos tratamientos.