El líder de BCN Canvi-Cs en el Ayuntamiento de Barcelona, Manuel Valls, ha recordado este sábado a la recién reelegida alcaldesa, Ada Colau, que no podría haber sido proclamada de nuevo sin tres votos de su grupo municipal ni la contribución de Jaume Collboni (PSC), y la ha felicitado por presentarse a la investidura porque no era fácil: "Enhorabuena".

"La política es escoger. Y en situaciones como esta hay que tomar decisiones arriesgadas y evitar lo peor. No se debe rehuir la responsabilidad; es sí o no. No hay blanco o abstención; es sí o no", ha dicho tras la votación, y ha remarcado que ofreció su apoyo a Colau sin condiciones, aunque ha dicho que pidieron un pacto entre comuns y socialistas.

Ha recalcado que han tomado esta decisión por responsabilidad y por sentido de Estado, no por "operaciones de Estado y los poderosos", con lo que ha dicho que no tiene nada que ver: a quienes le acusan de eso, les ha reprochado que en algunos casos pertenecen a partidos que sí fueron financiados por poderosos durante años.

"Barcelona no es un pueblecito", sino una ciudad tan importante que no puede someterse a visiones sectarias de partido, sino que requiere generosidad y apertura, motivo por el que los independientes de su grupo municipal han votado a Colau --los otros tres han votado en blanco--, a quien ha tendido la mano para pactos que convengan a la ciudad.

Ha defendido que en España no hay ni presos políticos ni exiliados, ante lo que le han abucheado asistentes de la sala, a los que Colau ha pedido respeto a todas las intervenciones, y entonces Valls ha defendido que muchos dirán que se ha hecho historia en el pleno de este sábado.