No es una sorpresa. Más bien era lo previsible. Pocas veces el boca a boca – en tiempos modernos, claro – ha funcionado tanto como en el caso de El juego del calamar. La distopía surcoreana ya es uno de los mayores éxitos de la corta historia de Netflix y le ha arrancado la medalla de oro a la producción británica de The Bridgerton como serie más vista de la plataforma de streaming con 111 millones de espectadores.

Sin ningún género de duda es la serie revelación de la temporada y no sólo en clave Netflix. Ha revolucionado a la audiencia desde su estreno, el pasado 17 de septiembre. Contextualizando estos datos, hay que subrayar que la plataforma de streaming aglutina a unos 208 millones de suscriptores en todo el mundo. De ese total, 111 millones se han acercado a El juego de calamar.

No obstante, y a pesar de todo, estos datos hay que valorarlos en su justa medida. Netflix utiliza una métrica de audiencia basada en el número de cuentas que visualizan un título en concreto y que, además, se mantuvieron en dicha producción durante al menos dos minutos. Por lo tanto, y teniendo en cuenta la negativa de estas plataformas a realizar una auditoría externa al uso, los datos pueden albergar también a aquellos usuarios que se decantaron por la serie durante este periodo de tiempo antes de regresar al ritual de escoger un nuevo producto.

La plataforma ha confirmado estos datos y el codirector ejecutivo y director de contenido de Netflix admitió que no lo habían visto venir. A pesar de ello, sí se barajaba la posibilidad de “convertirse en el programa más grande y más visto de la historia de la plataforma”.

Cocinado a fuego lento

Hwang Dong-hyuk es el creador de la exitosa serie El juego del Calamar y para poner en marcha la idea que se le había ocurrido 10 años antes de que se emitiera, se vio obligado a vender su ordenador portátil por 675 dólares en efectivo.

Aunque va camino de ser el mayor éxito de la historia de Netflix, la serie surcoreana había sido descartada por parte de algunos productos porque consideraban que era demasiado grotesca y se ajustaba poco a la realidad. Pero, con la pandemia, el creador, tal y como asegura en The Wall Street Journal, veía que "el mundo ha cambiado": "Todos estos puntos hicieron que la historia fuera muy realista para las personas en comparación con hace un década".

El juego del Calamar se estrenó el pasado 17 de septiembre y, frente a los presagios pasados del poco interés que podría tener en los espectadores, ya se ha convertido en un fenómeno mundial, siendo el contenido número uno de Netflix en 90 países.

La idea de Hwang Dong-hyuk ha desembocado en algo nunca visto en la plataforma estadounidense y ya se ha transformado en un fenómeno de masas. En otras redes sociales, como TikTok, la gente replica alguno de los juegos, aunque con un desenlace menos macabro.

A falta de un mes para la celebración de Halloween, algunos comerciantes de disfraces de Estados Unidos ya se preparan para poner a la venta la vestimenta que utilizan los participantes de El juego del Calamar.