Sebastián Cortés es uno de los nombres propios más interesantes de la escena pop nacional. Desde su debut en 2019, poco antes de una pandemia de Covid-19 que popularizó el fenómeno bedroom pop, un género en el que Sebastián Cortés fue pionero, ha cautivado a miles de fans gracias a su talento para componer y a una sensibilidad única. Acaba de publicar su último EP, No Sé Que Será de Nosotros.

Pregunta: Tu debut en 2019 coincidió con el auge del fenómeno bedroom pop. ¿Cómo crees que tu música ha evolucionado desde entonces hasta este nuevo EP?

Respuesta: El fenómeno del bedroom pop surgió como una consecuencia más de la pandemia. La gente se encerraba en sus casas y no tenía qué hacer. Yo fui una de esas personas pero me puse a hacer música. La diferencia es que ahora me intento desligar de eso y haciendo producciones más elaboradas que incluyen instrumentos como guitarras eléctricas, baterías, y detalles más orgánicos que puedan sonar a estudio, aunque las sigo grabando en mi habitación.

P: ¿Qué aspectos consideras más significativos en esa evolución?

R: La búsqueda de un sonido más elaborado sin que sea difícil de comprender. Empecé haciendo conciertos en los que yo mismo hacía todo y este EP está enfocado a tener conciertos más elaborados donde tocase yo con banda.

P: Este nuevo EP parece representar un cambio en tu sonido y en tu manera de mostrarte al público. ¿Qué te inspiró a tomar esta nueva dirección musical y artística?

R: La necesidad de no seguir anclado a la pandemia de 2020, y a seguir evolucionando. Tengo solo 22 años y cada día quiero hacer una cosa diferente. Supongo que hay mucho que tiene que ver con haber nacido a principios de los dosmiles, y formar parte de una generación que está expuesta a mil tipos de estímulos diferentes y a tantas opciones y posibilidades de hacer y de ser debido a la globalización y a internet.

P: En No Sé Qué Será de Nosotros vemos una expresión más profunda de tu identidad como artista, tanto en lo musical como en lo personal. ¿Podrías compartir algún momento o experiencia clave que haya contribuido significativamente a esta revelación de tu autenticidad artística?

R: Estos cambios han venido desde una disconformidad sobre mi última mixtape Todo ha cambiado donde no sentía que estuviera conectado a mí, estaba haciendo música a medio camino entre la electrónica y el pop indie, intentando encajar en un lugar en el que no me identificaba. Lo hacía para buscar validación y eso no funciona conmigo. Ahora quiero hablar de mí, y hacer música que hable de lo que he vivido y no escribir cosas únicamente porque suenen bien. En este EP hablo de algo que me ha tocado bastante dentro y siento que tenía que ser fiel a mí mismo.

P: Se ha mencionado que este trabajo se centra en el amor y el desamor. ¿Cuál es la mayor dificultad a la hora de transmitir esta especie de desnudez emocional?

R: Por suerte a mí no me resulta difícil. Me resulta mucho más fácil hablar de cosas que me pasan y que siento. Tristemente, cuando son sentimientos negativos me resulta bastante menos complicado hacer música. Así que, para mí, no supone mucha dificultad.

P: ¿Qué influencias musicales han sido más importantes para ti en este último proyecto?

R: El primer álbum de 1975, porque siento que consigue evocar una sensación de película adolescente que me encanta y es lo que estoy buscando plasmar ahora mismo. El segundo álbum de Isaac Gracie, el homónimo, porque es un disco que es muy sentimental y muy honesto y necesitaba algo así para escribir yo también. Y también el Tiene que haber algo más, de Alizzz, que, aunque sea el que menos se parece a mi EP, siento que ha influido muchísimo en mi manera de producir y en mi manera de tomar decisiones creativas para este proyecto.

P: La música pop a menudo se percibe como comercial y superficial, pero tu enfoque parece desafiar esa percepción al presentar letras más profundas y una conexión emocional más íntima. ¿Cómo trabajas para mantener la autenticidad en tu música dentro de un género que a veces es criticado por su falta de profundidad

R: Creo que el hecho de haber tenido cualquier género del mundo en la palma de mi mano a través de la MTV o de Internet porque el pop dependiendo del país tiene unas connotaciones y viene de ciertos sitios. No sabría decir siquiera si es pop. Las barreras entre géneros cada vez están más difusas. Lo que considero ese que es un trabajo sincero, es lo más importante del EP y lo que está presente en todas las canciones más que si forma parte de un género o de otro.

P: ¿Cuál es el tipo de conexión que esperas establecer con tu audiencia a través de tus canciones? ¿Hay un mensaje central que desees que se lleven tus seguidores después de escuchar No Sé Qué Será de Nosotros?

R: Me gustaría que el público pensase que soy una especie de storyteller de sus dramas y de sus vivencias, un narrador de historias. El mensaje creo que sería que hay que cuidarse bien la mente antes de crear cualquier vínculo de afecto con cualquier persona.

P: ¿Qué esperas de la próxima ronda de conciertos que empieza en febrero en Valencia?

R: Espero que se vendan todas las entradas y que la gente pueda tener un rato para desahogarse y para sentirse bien consigo mismos. Y por mi parte son conciertos muy especiales porque se une una pianista para tocar que hará que todo suene genial. Tengo mucha ilusión por que salga todo bien.