El verano no es nada sin sus canciones y en el de 1976 su principal temazo no fue otro que ¿Qué pasa contigo, tío?, el gran éxito de Los Golfos. Formado por los jovencísimos Manuel Malou y Jorge Sánchez, dos hermanos nacidos en Cuenca, pero que habían emigrado a Francia, y que despuntaron en el panorama musical español con un tema que aún sigue resonando entre muchos españoles (especialmente, entre los que peinan canas).

El fenómeno más allá del '¿Qué pasa contigo, tío?'

No hay duda de que el éxito de ¿Qué pasa contigo, tío? fue absolutamente fulgurante: no había nadie en España en aquel verano de 1976 que no hubiera escuchado esa frase, que comenzaron a repetir de norte a sur, y de este a oeste del país, especialmente entre aquellas personas que querían hacerse los modernos.

Los Golfos surgieron, de hecho, a través de un programa de radio al que la madre de ambos hermanos les presentó y de ahí apareció este dúo con letras pegadizas y ritmo endiablado.

Hay que destacar, además, que esta rumba-pop era, al mismo tiempo, un fiel reflejo de la época que atravesaba: el dictador Franco había muerto el año anterior y España se estaba dirigiendo hacia una democracia plena.

Efectivamente, en tiempo de crisis económica, los hermanos Manuel y Jorge representaban un poco a la imagen de los españoles que vivían en la periferia, el de los chicos de barrio, unos jóvenes que venían pisando fuerte a base de descaro y pasión por la música.

Manuel y Jorge Malou, mucho más allá de Los Golfos

Pese a que ¿Qué pasa contigo, tío?, no supuso la primera incursión de los hermanos ni tampoco la última, pues a pesar de que la carrera de Los Golfos fue breve eso no supuso que se bajaran de los escenarios sino que continuaron con su carrera musical que continúa hasta día de hoy.

De hecho, antes de Los Golfos, Manuel y Jorge formaron un grupo que sacó un disco bajo el nombre de Los Rumberitos un año antes de su gran hit con el sello discográfico RCA, el mismo que el que les dio fama.

Unos años después del fin de Los Golfos volvieron al mundo de la música, esta vez como Manolo y Jorge, con cuya canción "Ella-a-a" quisieron presentarse al festival de Eurovisión; sin embargo, ese año (1979), la escogida fue Betty Misiego con "Su canción".

Tras finalizar este grupo, Manuel y Jorge emprendieron caminos por separado. Y mientras que Jorge, que ha seguido en el mundo de la música aunque de forma mucho más discreta -apenas se sabe algo de él- Manuel ha tenido una carrera más visible.

Lo primero que hizo tras terminar con Manolo y Jorge fue meterse en el grupo Plásticos. "Eduardo Benavente era el cantante, se fue a los Pegamoides y yo le sustituí como cantante en Plástico", explica el propio Malou en una entrevista concedida a Efeme.

"Allí estaba Toti Árboles, que luego fue batería de La Frontera, Emilio Estecha, que fue bajista de Olé Olé, y mi amigo Rafa [Gutiérrez], que es guitarrista de Hombres G. Fue un grupo que duró muy poco", añade.

Tras esta incursión en el mundo new wave llegó el grupo Toreros (o Toreros After Olé, como se les conoce más frecuentemente) en la que también estaba su hermano trabajando como batería.

"La estética punk fue la que luego me permitió salir con los Toreros del país, grabamos fuera de España, con un productor holandés y, joder, cuando terminábamos un concierto punk, en la típica fiesta después del concierto, me salía España y cantaba por rumbas y entonces era cuando a la gente le resultaba interesante", explica Malou al mismo medio.

En la actualidad, Manuel Malou se denomina en su Instagram como "músico hispano-francés, pionero en mixturas rumberas con otras músicas del planeta". Recientemente ha publicado su biografía ¿Qué pasa contigo, tío? La intensa vida de Manuel Malou. Un artista que nunca quiso ser famoso, escrito junto a Jorge Portela y Mayra Marín, que han reconstruido su vida a través de consersaciones por Skype. De Jorge, en cambio, se sabe que sigue trabajando en percusión y está "saltanto de lío en lío" o, más bien, de gira en gira.