Carlos Ares es uno de los artistas más talentosos del panorama nacional. Tras más de un lustro en la briega, se ha hecho con un lugar propio -un universo- entre sus compañeros de profesión y el público más exigente, no solo como artista principal e intérprete, sino como productor y músico de estudio y directo, capaz de marcar una época dotando de un sonido único las propuestas de algunas de las grandes esperanzas del pop patrio (Paula Cendejas, Marc Seguí, Vic Mirallas…).
El imaginario creativo de Carlos Ares -como el de todo gran artista- muda de piel con el paso del tiempo: si en sus inicios miraba al mundo a través de un cristal lírico y minimalista, a día de hoy lleva tiempo construyendo (deconstruyéndose) y viajando hacia lo orgánico, lo rural, lo folk, lo natural. Carlos Ares recorre así un camino vivo y activo, no un deambular, que comenzó con los sencillos 'Velocidad' y ‘Cigarra’, que lograron el reconocimiento unánime de artistas y crítica especializada.
Ahora, y ya de la mano de BMG, Carlos Ares presenta ‘Aquí Todavía’, una canción irrepetible, que une pasado y futuro con la misma facilidad con la que une lo orgánico y lo elaborado, lo etéreo y lo material. ‘Aquí Todavía’ juega con la luz como un atrapasol que cuelga de una ventana en un día claro.
Un crisol de tonalidades y melodías, un viaje que nos lleva desde el “You Can’t Always Gea What You Want” de los Stones, a las canciones más icónicas de Edward Sharpe & The Magnetic Zeros, tamizado por el mundo rural galego más que por la campiña inglesa. Mismo corazón, distinto cuerpo. Las cuerdas que habitan el espacio que deja la voz de Carlos Ares en ‘Aquí Todavía’ (quizá su interpretación más lograda, precisamente en la que más libre se siente) sirven como vehículo para que el imaginario que el artista está desarrollando alrededor de ‘Peregrino’ -que así se titula su álbum debut- cobre fuerza, sentido y sentimiento.
Carlos Ares da un paso más con ‘Aquí Todavía’, un tema que surge de la necesidad del optimismo tras una crisis, de la vitalidad necesaria para la reconstrucción y que se dispara, como la luz que sale del atrapasol, en todas direcciones, sacando los colores que antes no se manifestaban con claridad.
El imaginario de Carlos Ares del que hablamos previamente está atravesado por la vivencia de la sencillez, la naturaleza y el mundo rural. Hay mucho de esa experiencia en su música, que recoge la energía y la vitalidad de los lugares siempre vivos.
Además, para acompañar una canción como 'Aquí Todavía', Carlos Ares presenta un videoclip que funciona en la misma línea, con los mismos códigos, que el apartado musical. El visual recoge imágenes de un viaje maravilloso con la compañía elegida entre las montañas y los campos galegos durante el periodo de Berrea de los ciervos, el símbolo de esta canción.
