Sheldon Cooper es el principal protagonista de la serie The Big Bang Theory, una producción televisiva de mucha calidad, muy ajustada en materia científica y además divertida, no tiene más que parabienes. Yo soy un gran aficionado a esta serie, vuelvo a ver capítulos y siempre me entretienen y gustan, pero hay algo que no puedo dejar de observar: su comportamiento ambiental es muy deficiente. Gente joven, la mayoría personas muy cualificadas y con un perfil muy urbanita, pero para los cuales el medioambiente no forma parte de su vida cotidiana.

Veamos la serie en perspectiva para luego concretar esta afirmación.

Al finalizar la serie, se sincronizó con otra que bajo la fórmula de “Spin-Off” de 'Big Bang' nos trasladaba a la infancia de Sheldon en su Texas natal y con su familia. Muchos niños entre una serie y la otra y una realización también estupenda. Muy recomendable.

En la infancia de Sheldon podemos ver cómo las comidas en familia se realizaban en casa, era cocina cocinada (siempre por la madre, es verdad, que allí nadie movía un dedo) y escasamente en alguna celebración se comía fuera del hogar. Comida elaborada, vajilla y cubiertos para múltiples usos y, excepto en la presencia típica de Texas de la carne, alimentos más naturales y mayor presencia de vegetales.

Es verdad que el estado de Texas no es el mejor ejemplo de vida saludable y se refleja en la serie: uso del vehículo para todo, cerveza en grandes cantidades y otros ejemplos similares; pero incluso allí lo que no es cerveza se suele consumir de forma más natural: refrescos de cola en pocas ocasiones, mayor consumo de agua, reparación de los objetos rotos y aprovechamiento de la ropa.

Si seguimos cronológicamente la vida ficticia de nuestro protagonista, Sheldon, cuando se hace mayor y se marcha a vivir con sus compañeros de piso y a trabajar como un gran físico teórico a una gran ciudad, se debería de producir una evolución mayor de su actitud ambiental.

Sheldon como científico tendría de forma clara la seguridad sobre impacto del ser humano sobre el planeta, conocería los efectos del cambio climático y el impacto de los residuos y los combustibles fósiles. En ese momento habría mayor información, mayor concienciación y una gran oportunidad de tener tener conductas más sostenibles.

Como científico sabría que la incidencia del ser humano en el campo climático que estamos sufriendo no es “porque toque ahora” sino que nunca se han encontrado registros o datos tan preocupantes como ahora, también sabría que en esto existe el mayor consenso científico de la historia. El 98% de las publicaciones en revistas científicas de prestigio mundiales está en esta línea y solo el 2% asumen que existe este cambio climático pero dudan del papel del ser humano. Nunca hubo tanta unanimidad en la ciencia. Incluso en temas que nos parecen más “chistosos” como aquellos que dudan de si la Tierra es plana o es una esfera, en USA cerca del 30% de los jóvenes de su edad piensan que es plana.

Y como amante de la exactitud de las matemáticas sabría que consumimos muchos más recursos que los que el planeta es capaz de generar. Sabría que si todo el planeta consumiese como en su país, se necesitarían tres planetas Tierra y medio.

Sin embargo, vemos un retroceso en la serie principal: The Big Bang Theory. Nunca cocinan, excepto cuando su novia le preparó un plato de pasta con salchichas para recordarle el plato que le preparaba su madre o las famosas comidas de la madre de otro de los protagonistas, cuya línea de humor se basa en su tremendo apetito. El resto de las veces consumen comida del exterior, no siempre saludable, usan platos, cubiertos y enseres siempre de usar y tirar y no aparece en su casa ningún contender diferenciado. Aparentemente, tiran la basura toda junta, no separan para reciclar. Las pocas veces que han bajado la basura en algún capítulo lo han realizado en una única bolsa.

Otro de los aspectos que llama la atención es que cuando comen en casa o en la Universidad donde trabajan siempre beben bebidas en botellas plásticas de un solo uso, además de unos colores las bebidas que no aparentan ser muy naturales. El agua, cuando se bebe es de botella de nuevo, nunca del grifo. En USA el 93% de sus habitantes tienen agua potable de calidad a su disposición. En España tenemos esta posibilidad el 98%.

Siguen usando el coche privado para casi todo, con alguna excepción del tren y sobre todo por la pasión obsesiva de Sheldon por el mundo del ferrocarril.

No pretendo poner más cuestiones negativas sobre una serie que me encanta y con la que disfruto, pero si usarla para ver que es muy sencillo estar concienciados, pero luego no aplicarlo en el día a día. Sheldon en alguna ocasión usa una camiseta con el símbolo del reciclaje. Puro snobismo.

Sería estupendo que los guionistas y directores de series de ficción tuviesen en cuenta estos criterios y pudiesen tener claro que pueden ayudar a un planeta mejor y una sociedad más coherente simplemente con el ejemplo de los protagonistas de estas series. La educación pasa también por los guiones.