Como cada año un pueblo será escogido por Ferrero Rocher para ser iluminado. La marca, entre las más reconocidas de la Navidad, presentaba semanas atrás su su novena edición de Juntos brillamos más. Este jueves ElPlural.com ha podido conocer los tres finalistas que se disputarán la tan ansiada iluminación. Se trata de Aínsa (Huesca), Mojácar (Almería) y Santillana del Mar (Cantabria).
Los tres pueblos finalistas de Juntos brillamos más, la Navidad de Ferrero Rocher
Tras dejar atrás a otros cuatro candidatos, las localidades que han conseguido superar la primera votación para la iluminación navideña de Ferrero Rocher han sido las ubicadas en el sur, norte y en la comunidad aragonesa. Estos han sido algunos de los aspectos que seguramente hayan motivado a los votantes.
Aínsa (Huesca): pequeña villa medieval a los pies de los Pirineos
Apadrinado por Morella (ganador en 2015), Aínsa está ubicado en la confluencia de los ríos Cinca y Ara, a una altura de 589 metros. La villa, localizada a los pies de los Pirineos, está considerada como uno de los pueblos más bonitos cerca del Parque Natural de Ordesa y Monte Perdido.
Su geografía es precisamente la que le convierte en un lugar ideal para el turismo activo entremezclado con deportes y actividades de montaña. Además de ello, su comercio forma parte del otro motor económico del lugar. Entre sus monumentos principales se levantan la iglesia de Santa María de Aínsa, su amplio recinto del castillo y su siempre importante en un pueblo Plaza Mayor.
Mojácar (Almería): un viejo conocido del sur
Pegado a la costa y apadrinado por Peñíscola (ganadora del año pasado), el municipio almeriense es un viejo conocido de la costa andaluza, siendo sus gentes, su aroma y ambiente mediterráneo y sus casitas azules -tan características del sitio- las que pueden llevar a la localidad a demostrar que brilla más allá del verano.
Santillana del Mar (Cantabria): villa de “las tres mentiras” y hogar de Altamira
Conocida como "la villa de las tres mentiras" -pues ni es "santa", ni "llana", ni tiene "mar- y apadrinada por Rubielos de Mora (ganador de 2016), en ella puedes visitar la Cueva de Altamira o el Monasterio de Santa Juliana.
Su aspecto medieval de calles empedradas sobre un escenario bañado por el mar y los aires del norte hacen de Santillana del Mar una de las ciudades más visitadas de la comunidad autónoma. Eso por no hablar de sus talleres artesanos o su gastronomía, donde destaca su leche con bizcochos, la merienda más popular del territorio.
Cómo votar tu pueblo favorito en Juntos brillamos más
Tras un primer asalto apretado, quienes quieran pueden seguir votando en esta segunda fase, que se prorroga desde hoy mismo (día 1 de diciembre) hasta el próximo día 11. Para ello, solo hay que acceder a la página web de Ferrero Rocher.
Además de aportar tu granito de arena para que uno de estos pueblos brille más que nunca, el mero hecho de votar te incluye en un sorteo en el que puedes ganar una de las 15 pirámides que ofrece la marca de 96 bombones.
Los pueblos que se han quedado fuera de la Navidad de Ferrero Rocher
Los pueblos que se han queddo fuera lo han hecho tras un ajustado recuento. Aunque no haya sido posible este año, seguro que vuelven con más fuerza en los próximos. Desde luego, todos ellos disfrutan depremios que les reconocen como lo que son: auténticas maravillas. Desde luego, motivos para visitarlos no faltan.
Cazalla de la sierra (Sevilla): ‘centro’ de la Sierra Norte
Apadrinado por Guadalupe (ganadora en 2017 y 2019) es nuevamente su entorno natural lo que cada año despierta la curiosidad de cientos si no miles de visitantes; y es que el lugar se ha convertido en los últimos tiempos en centro de turismo rural del Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla.
Chinchón (Madrid): una plaza de cine y teatro
Apadrinado por Valderrobres (primer ganador del concurso, en 2013), Chinchón siempre aparece en este tipo de listas. De hecho, el pueblo ha sonado en los últimos años para ser reconocida Capital de Turismo Rural.
Lo que está claro es que Chinchón se corresponde con un pueblo de cine y de teatro. Primero de todo por haber sido escenario de largometrajes y en segundo lugar por su teatro Lope de Vega y su plaza medieval que, con más de 200 balcones de madera o claros fue utilizada en su día para celebraciones taurinas y autos sacramentales. En la actualidad tienen lugar en él los Carnavales y un Mercado Medieval. También es interesante su Torre del Reloj (o lo que queda de la iglesia más antigua del lugar).
Portomarín (Lugo): surgido de las profundidades y aliado de Santiago
Portomarín es un pueblo creado de cero tras la decisión de construir el embalse de Belesar en Chantada, que produjo un crecimiento del río Miño en 1963 y obligó a los antiguos ciudadanos a abandonar la población. Lo cierto es que esto era más común en la época de lo que ahora se podría pensar.
Curiosamente, en 1946 fue declarado Conjunto Histórico Artístico y desde entonces -también en la actualidad- es un gran aliado del patrón Santiago y de quienes cada año se lanzan a hacer el Camino.
Sigüenza (Guadalajara): del Cid a Félix Rodríguez de la Fuente
Aunque nada tengan que ver entre ellos, Sigüenza es un poco hogar de ambos. Al primero le rinde tributo la ruta con su nombre mientras que el segundo grabó en esta localidad parte de la cabecera de sus documentales.
Conocida como la villa del Doncel por la escultura fúnebre de Martín Vázquez de Arce y apadrinada por Puebla de Sanabria (ganadora de 2018) destaca por su belleza, patrimonio y fusión de estilos a la vez que recuerda a una antigua fortaleza amurallada que, dicho sea de paso, las distintas religiones han favorecido con el paso de los siglos.
