España cuenta con aproximadamente 8.000 kilómetros de costa, donde se encuentran numerosas ciudades y pueblos de lo más variopintos y variados. El mar siempre es un buen lugar para desconectar, relajarse y disfrutar de un baño, pero no todos los lugares son igual de óptimos si se busca tranquilidad. A continuación, se detallan algunas de las ciudades costeras más sorprendentes en este sentido según el portal oficial de turismo de España:

1. Santander

La capital de Cantabria, conocida popularmente como ‘la novia del mar’, es una de las ciudades más populares del norte de España. Su pasado se puede apreciar en el pequeño centro histórico que ha llegado hasta nuestros días, ya que la ciudad sufrió un devastador incendio que la sumió en cenizas, pero tiene espectaculares e inconfundibles lugares en los que disfrutar de buenos ratos, como la zona del Sardinero, donde se pueden contemplar varios palacetes, la península de la Magdalena o también se puede realizar la ruta entre acantilados hasta el faro de Cabo Mayor. No obstante, conviene visitar en Santander la Iglesia Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, el imponente Centro Botín o subir en barco para pasear por Somo, Pedrera y las dunas del Puntal y el Estuario del Miera.

Santander

2. Ribadeo

Este municipio de Lugo es mundialmente conocido por la playa de As Catedrais, todo un símbolo de la costa gallega. La ría en la que se encuentra Ribadeo es fronteriza con Asturias y en ella se pueden practicar diferentes deportes acuáticos. En Ribadeo hay que visitar su puerto y su casco histórico, dejándose maravillar por sus casas de colores con claras referencias indianas. También hay que subir a la Capilla de la Trinidad para observar unas preciosas vistas panorámicas de la ría y del pueblo.

Playa de las Catedrales en Ribadeo

3. Donostia-San Sebastián

También en el norte peninsular se encuentra esta bella ciudad del País Vasco. En ella se respira la esencia del cine, por la celebración del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, pero también de la gastronomía, siendo uno de los mejores lugares para comer pintxos en España. Uno de sus elementos más conocidos es la playa de la Concha, por donde se puede disfrutar de un paseo de lo más grato, además del Peine del Viento, un conjunto arquitectónico escultórico de Eduardo Chillida.

La importancia de esta ciudad fue tal que fue elegida residencia estival para monarcas y aristócratas en el siglo XIX. Entre sus calles se puede contemplar el estilo de la belle époque combinado con la modernidad, siendo su máximo exponente el Kursaal.

San Sebastián

4. Sanlúcar de Barrameda

El sur peninsular también es un buen lugar para desconectar. Sanlúcar de Barrameda, en la costa atlántica andaluza, concretamente en la provincia de Cádiz, es una ciudad que destaca por sus casas blancas en la desembocadura del río Guadalquivir y confluyente con el Parque Nacional de Doñana. Entre sus calles hay que visitar monumentos como el Castillo de Santiago o el Palacio de los Infantes de Orleans y Borbón, y una de las mejores actividades para terminar el día es disfrutar del atardecer desde la orilla de sus playas.

Sanlúcar de Barrameda