La Guerra Civil, episodio, junto a la dictadura franquista, más oscuro de nuestra historia reciente, aún sigue presente en buena parte de la geografía española. Entre los ejemplos más claros de ello destaca Belchite, una localidad zaragozana que fue golpeada, no solamente por el conflicto bélico, sino también por la pandemia de la peste, en la Edad Media.

El pueblo está situado a unos 50km de la capital y se divide en dos. El viejo fue testigo de la Batalla de Belchite, entre agosto y septiembre de 1937, y hoy en día es atracción turística. El enfrentamiento tuvo lugar en el marco de la ofensiva del Ejército Popular sobre la ciudad aragonesa, cuando el territorio estaba bien fortificado y venía siendo uno de los principales objetivos de las tropas republicanas en el Frente de Aragón.

Belchite: el pueblo “maldito”

Algunos vecinos de la zona defienden que todavía se escuchan los gritos de los caídos en la Guerra. Los hay también que defienden que el Conde de Belchite vaga por sus calles porque fue sacado de su tumba y no encontró un lugar en el que descansar.

Por su parte, el periodista Carlos Bogdanich decidió comprobar, en 1986, si lo que se contaba tenía algún sentido y una noche de octubre se acercó al pueblo con su programa de televisión Cuarta Dimensión. Afirmó, después de aquello, que sintieron como una fuerza les atrajo y controló durante unas horas. Cuando revisaron las cintas identificaron sonidos “de guerra” como aviones, disparos, tanques e, incluso, aseguraba el equipo, canciones militares.

Belchite (Zaragoza)

Acogió el rodaje de ‘El laberinto del fauno’, entre otras películas

Desde ese momento la leyenda comenzó a acrecentarse y llega hasta nuestros días. Así las cosas, los protagonistas de entonces relataron también sucesos paranormales durante el rodaje de Las aventuras del Barón de Munchausen, de Terry Gillian (1989).

No obstante, todo lo que se cuenta aquí no son más que eso, leyendas, y es que el pueblo disfruta en la actualidad de un increíble patrimonio histórico del que hablaremos a continuación.

Pero además, y para los amantes del cine o del conocido como turismo de película (nuevamente extendido), hay que subrayar que Belchite sirvió también de telón de fondo en filmes como El laberinto del Fauno, de Guillermo del Toro y que tiene, precisamente, la Guerra Civil como escenario; o Buen Viaje Excelencia, de Albert Boadella (2003); en la que el mismísimo Franco vuelve durante sus últimos meses de vida al lugar zaragozano.

Pueblo Viejo de Belchite en ruinas

Qué ver en Belchite en un día

El pueblo puede visitarse en la actualidad y en un día. Y tranquilos, que no ofrece experiencias paranormales, aunque sí una serie de monumentos que, además de merecer la pena conocer, guardan un trozo de la historia de nuestro país.

Así, para comprar la entrada solamente tienes que acceder a la página web. En ella te aparece el precio de cada ticket y los horarios disponibles para conocer los distintos lugares de la localidad. Los sitios y actividades más destacados son:

  • Recinto histórico: En un recorrido de aproximadamente hora y cuarto, la visita diurna te acercará al legado arquitectónico y patrimonial de Belchite, compuesto por la Torre del Reloj (de estilo mudéjar y declarada Patrimonio de la Humanidad) y las iglesias de San Agustín y San Martín de Tours, así como algunos conventos.
  • La huella de la Guerra Civil: Si eres un apasionado de la Historia, tanto el pueblo como sus inmediaciones conservan vestigios de la batalla: trincheras, campos de refugiados… e incluso un campo de aviación. En este punto, puedes aprovechar para conocer otras localidades de alrededor como Fuendetodos, Azuara, Codos y Plenas.
  • El Planerón: Si te gustan los animales, especialmente las aves, tampoco debes perder la oportunidad de acudir al Planerón. Para hacerlo de la manera más óptima posible hay varios itinerarios autoguiados de una hora de duración que te permitirán apreciar con todo este regalo de la naturaleza.
  • Cultura gastronómica: si todo lo anterior no te parece suficiente, debes saber que la comida es otro de los grandes atractivos de la localidad. Así, la región zaragozana te pone en bandeja varias posibilidades gastronómicas y de cultura, por ejemplo, vinícola en el Campo de Belchite y su bodega Tempore, situada, eso sí, en Lécera.

¿No te parecen suficientes razones para conocer Belchite en verano? Si conoces esta impresionante localidad durante tus vacaciones no dudes en contarnos tu experiencia.