Tienen todo a favor en el momento presente y saben que las generales pueden convertirse probablemente en un majestuoso paseo triunfal sin precedentes en la historia popular. Descartan una victoria socialista, pero no quieren arriesgar lo más mínimo. Sueñan con la placidez que les proporciona el hundimiento del PSOE. La segunda vuelta –la primera ha sido maravillosa para la derecha-, cuanto antes, mejor.

Otro seísmo
Escuchan con entusiasmo los dirigentes genoveses que altos responsables del PSOE hablan de refundar el partido o de cambiar íntegro al estado mayor actual y no dejan ni un segundo de frotarse las manos los conservadores. En 2000 ya hubo en el PSOE otro seísmo de gran calado. Desaparecieron entonces los mandamases y se organizó una Comisión Gestora.



El rey del mambo
Emergió luego, en el XXXI Congreso del partido, un desconocido llamado Zapatero que fue elegido secretario general y candidato a las elecciones generales. Pero en 2004, las ganó quebrando de este modo a un PP que se creía ya el rey del mambo. ¿Once años después de aquella refundación del PSOE hay que poner en marcha y con numerosos riesgos una operación similar?

El futuro del socialismo
Dentro de diez meses –con el verano de por medio y las inacabables fiestas navideñas más tarde-, el socialismo español se jugará  su futuro. Si vuelve a perder más o menos que de forma parecida a la de las municipales y las autonómicas, el PSOE puede desplomarse y habrá que ver si logra recuperar el aliento. De aquí a marzo de 2012 no es imposible que se produzca un resultado que, al menos, permita poner de cuando en cuando contra la pared a Rajoy. Incluso cabría pensar en un empate técnico o una ajustada victoria socialista. Hay que frenar la caída libre del PSOE antes de que sea irreversible.

La extrema derecha
Para ello lo prioritario es –una vez terminadas las primarias-  formar un potente equipo de dirección en el que quepan las diversas sensibilidades y cuyos miembros estén dispuestos a dejarse la piel en el intento. Porque  si Rajoy arrasa de nuevo, España pasará a engrosar el voluminoso dossier de países europeos en manos conservadoras. No lo olvidemos: son ya de derechas casi todas las naciones de Europa y, mientras, la extrema derecha crece y crece.



¿Galgos o podencos?
Nada, pues, de regalar al PP el adelanto de las elecciones. Y nada de desperdiciar ni un solo minuto en reyertas estériles. Tomás de Iriarte, autor de un célebre poema  titulado “¿Galgos o podencos?”, termina su narración así: “Son galgos, te digo” “Digo que podencos” “En esta disputa, llegando los perros, pillan descuidados a mis dos conejos.” “Los que por cuestiones de poco momento dejan lo que importa, llévense este ejemplo”. Ojo, porque “lo que importa”, en este caso, es que Rajoy en marzo no se salga con la suya. Y para ello es imprescindible vencerle en las urnas. Hay tiempo aún, pero no lo dilapidemos con peleas internas.

Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM