La asociación FACUA-Consumidores en Acción ha pedido al Gobierno que intervenga el precio de mascarillas y guantes después de haber detectado precios “absolutamente desproporcionados” por las primeras, según indica la organización en su página web: “hasta 19,95 euros la unidad”. La reivindicación se plantea también a raíz de que, el pasado viernes, el Ministro de Sanidad, Salvador Illa, anunciara que el Gobierno sopesa aconsejar su uso generalizado en la calle tras semanas recomendándolo solo a sanitarios (las de filtro), contagiados de Covid-19 (las quirúrgicas) o personas son síntomas, y también la OMS se mantenga abierta a la recomendación, a la espera de los resultados de investigaciones en marcha que podrían revelar un elevado número de personas que se contagian a partir de infectados asintomáticos, y que la incidencia de aerosoles y no solo de gotículos en el contagio podría ser más importante de lo que se piensa.

Así, FACUA reclama que el Gobierno establezca “un máximo por unidad”, y lo acompañe de “controles, decomisos y sanciones contra las empresas” que vulneren la medida. Solo así, entiende la organización, podrá garantizarse “la implantación progresiva de medidas que garanticen el acceso para todos”, y la “distribución controlada para evitar acaparamiento y abusos”. La asociación recuerda que ya se han intervenido los precios de varios sectores, y uno de ellos, el de las telecomunicaciones, a petición de esta misma organización.

Explica la especulación de los precios de las mascarillas la escasez de stock en los establecimientos que habitualmente las venden, como las farmacias. Para afrontar la carencia y dada la excepcionalidad del Estado de Alarma, el Ministerio ha publicado una guía con recomendaciones para elaborar de forma casera mascarillas higiénicas, que, señala el organismo, en ningún caso sustituyen a los Equipos de Protección Individual (EPI) ni a los Productos Sanitarios convencionales (PS), y por tanto su uso debe restringirse a personas que no estén obligadas al uso de mascarillas quirúrgicas ni de protección (las conocidas FFP2 o 3).