¿Te cuesta un mundo tomar la decisión de romper con algo que te hace daño? Un estudio demuestra que Irónicamente, en lugar de desconectarnos, tendemos a comprometernos demasiado. Ya sea que se trate de una mala relación, una estrategia corporativa fallida o un automóvil viejo que no se puede abandonar, a todos nos gusta creer que nuestras decisiones de dejar las cosas en claro son racionales y lógicas, pero la verdad es que nuestras mentes nos engañan.

Esa confusión que gira la cabeza de cómo alguien puede permanecer en una relación tóxica, malgastar aún más dinero en un automóvil deteriorado o apoyar de forma inquebrantable a un político sombrío puede explicarse por un sesgo de toma de decisiones llamado "escalada de compromiso". Esto se refiere a la tendencia a continuar con un curso de acción negativo, especialmente cuando ha invertido una cantidad significativa de recursos en él.

No puedes romper por exceso de positivismo

En un artículo publicado recientemente en Academy of Management Annals , se analizó el estado de la ciencia con respecto a las investigaciones en la "Escalada del Compromiso". Los estudios que revisaros examinaron varios contextos, incluidos los empresarios que se aferran a empresas en quiebra, las agencias gubernamentales que continúan financiando programas de bajo rendimiento e incluso los escaladores del Everest que enfrentan el dilema de persistir debido a las malas condiciones climáticas.

Una miríada de factores puede influir en la escalada del compromiso, pero un factor apareció consistentemente en todos estos contextos: la positividad. Pero la positividad no es positiva. Fomenta este mal hábito.

Por ejemplo, un estudio se centró en un hospital en Inglaterra que continuó involucrado en prácticas inseguras y políticas ineficaces durante más de una década frente a las quejas de los pacientes, las crecientes tasas de mortalidad y las investigaciones externas. ¿Pero por qué? Resultó que la cultura organizacional del hospital tenía un fuerte énfasis en el optimismo: los empleados se centraron sistemáticamente en los comentarios positivos y descartaron cualquier evidencia de errores o fallas.

Otro estudio se centró en el papel de los líderes corporativos, descubriendo que los CEO tienden a persistir con estrategias comerciales fallidas, y que los gerentes a menudo refuerzan estas malas estrategias porque tienen miedo de estar en desacuerdo abierto con el máximo líder de sus compañías. Los analistas externos también contribuyen, elogiando el liderazgo "audaz" y "decisivo" de los CEO, lo que alimenta aún más la percepción de que la continuación de estas estrategias es la decisión correcta.

Asociamos el proyecto personal a la persona misma

La "escalada del compromiso" también tiende a ocurrir cuando detener el curso de la acción tendría implicaciones negativas para la identidad de la persona. Por ejemplo, varios estudios indican que los empresarios tienden a persistir en empresas fallidas cuando ven el negocio no solo como su bebé, sino como parte de sí mismos. El nombre de su negocio se adjunta a su identidad, por lo que cuando un empresario se presenta, ella no es Jane Smith. Ella es Jane Smith, dueña de Venture X.

Cómo salir de la "Escalada de Compromiso"

Afortunadamente, descubrimos algunas ideas basadas en la investigación sobre cómo evitar o reducir la escalada del compromiso. Primero, recuerde que cuanto más se pone en el curso de la acción, más arraigado se vuelve. Por lo tanto, antes de comenzar ese proyecto o realizar una gran inversión, establezca metas o expectativas específicas que pueda usar como punto de referencia más adelante.

Si estás en el banquillo de los acusados tratando de decidir si continuar o detenerse, no hagas suposiciones. Salga y recopile información clara e imparcial para ayudarlo a pensar con más claridad. Esto podría significar obtener datos objetivos (como las tendencias de ventas o los comentarios de los clientes) o consultar con un tercero neutral para obtener un consejo sincero.

Finalmente, date cuenta de que la forma en que piensas sobre la decisión importa. No lo defina como si continuar o abandonar, sino continuar o seguir un curso de acción alternativo.

Esto amplía su forma de pensar y le ayuda a abrir los ojos a la posibilidad de alejarse del curso defectuoso gastando su tiempo o dinero en otras cosas.

La conclusión es que el compromiso no siempre es bueno. A veces puede cegar a la gente a la realidad y mantenerlos encerrados en un curso de acción. Recuerde este prejuicio la próxima vez que sospeche que alguien (tal vez incluso usted) puede estar demasiado comprometido con una decisión.

¿Quieres saber más? Este estudio lo hemos encontrado en la Universidad de Delaware y puedes leer el estudio original aquí: Dustin J. Sleesman et al. Poniendo la escalada del compromiso en contexto: una revisión y análisis multinivel, Academy of Management Annals (2017). DOI: 10.5465 / anales.2016.0046