NO MORE HATERS es un proyecto de la Fad (Fundación de Ayuda contra la Drogadicción) y Maldita.es, con el apoyo del proyecto programa Impact Challenge de Google.org, y su objetivo es luchar contra los mensajes de odio “llegar a 35.000 adolescentes de entre 14 y 29 años para que sean conscientes de la importancia de generar discursos responsables libres de odio, basados en la inclusión y en el respeto”, explican los responsables del proyecto en su página web.
Los mensajes de odio, añaden, “están cada vez más presentes en el discurso público online”. Según los datos del Ministerio del Interior, en España este tipo de delitos crecieron más de un 7% entre 2018 y 2019, y más de la mitad de los delitos de odio conocidos por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se han producido en internet, seguidos de las redes sociales, la telefonía y los medios de comunicación social. “Aunque este tipo de mensajes se reproducen en cualquier entorno, internet y las redes sociales se han convertido en el caldo de cultivo ideal para que quienes odian se amparen en este espacio virtual que les permite el anonimato”.
¿Por qué centrarse en los jóvenes? “De los delitos de odio registrados en 2019 en España, casi la mitad de los autores tenían menos de 26 años, según datos del Ministerio del Interior”, indican. Fad y Maldita.es pondrán en marcha una investigación que “dibujará un diagnóstico de la situación y que se basará en entrevistas con expertos, grupos online con adolescentes y jóvenes y seguimiento de redes sociales para identificar y analizar este tipo de mensajes”.
NO MORE HATERS también se apoya en una app con la que adolescentes y jóvenes sabrán cómo identificar y denunciar mensajes de odio que encuentren en la red o en su entorno más cercano: “el objetivo es que 15.000 estudiantes de Secundaria y 20.000 jóvenes de hasta 29 años la utilicen en su rutina diaria y les sirva también reconocer este tipo de mensajes, que no siempre son tan fáciles de identificar”. Con una evaluación previa y posterior, y pruebas específicas para saber cómo resolver conflictos y generar discursos alternativos basados en el respeto, “los adolescentes y jóvenes tendrán herramientas para enfrentarse a este tipo de situaciones”.
