La primera fregona, con el diseño que conocemos hoy, la inventó, a mediados de la década de los años 50, el español Manuel Jalón Corominas, un ingeniero aeronáutico y oficial del Ejército del Aire. Ya antes se recurría a bayetas y mochos húmedos para limpiar, de rodillas, los suelos; pero, en un viaje que hizo Corominas a Estados Unidos, descubrió un sistema que reforzaba el trabajo de las manos con un rodillo y un balde. Con Emilio Bellvis, mecánico de la base aérea de Zaragoza, creó el prototipo de la fregona y fundó la empresa, Rodex, para producirlas en masa.