Miremos donde miremos encontraremos los efectos del cambio climático. Un fenómeno global como este afecta a prácticamente todas las prácticas humanas, a todos los países y a todos los sectores sociales. Por ejemplo, el mundo de las finanzas, que normalmente parece frío y hermético, también está cambiando debido al incremento de las temperaturas.

Riesgos y oportunidades

La organización ambientalista World Wildlife Fund, más conocida por sus siglas WWF, ha elaborado un informe sobre el presente y el futuro del mercado financiero y de inversiones en relación con el cambio climático. Para la creación de este estudio llamado “Riesgos y oportunidades en las inversiones financieras” se han recabado las opiniones de expertos de diversas disciplinas y responsables gubernamentales. La idea principal es la de alinear a los inversores con los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero acordado en París. También se pretende llamar la atención sobre la responsabilidad de este sector en el cambio climático y generar un debate sobre las implicaciones que el fenómeno puede tener a medio y largo plazo sobre las finanzas mundiales.

Inversiones arriesgadas

En el informe se defiende el sinsentido de continuar invirtiendo en tecnologías que supongan el consumo de combustibles fósiles. No solo desde un punto de vista medioambiental. También en cuanto a la propia naturaleza de la inversión. Se trata de un sector en retroceso, cada vez menos rentable y sujeto a restricciones cada vez mayores y a una inestabilidad clara. En este sentido, el informe expone ejemplos como el del Banco Central de Noruega que ha pedido permiso a su gobierno para desinvertir en industrias relacionadas con la extracción o refinamiento de petróleo y gas. Ya hace unos años, retiró los fondos depositados en industrias dependientes del carbón. Sin embargo estamos lejos de que este tipo de actitudes sean la norma. En la actualidad, el 25% de los valores negociados en las bolsas europeas están relacionados con compañías e industrias que emplean el carbón como combustible.