El estado de Victoria, al sureste de Australia, ha declarado el estado de desastre. A No es el primer estado australiano que declara este estatus, también lo han hecho Kangaroo Island, que es la tercera isla más grande de Australia, Vivonne Bay o Nueva Gales del Sur, donde el fuego se ha cobrado ya 20 vidas y más de 1.800 casas quemadas.

La consideración implica otorgar más poder a las fuerzas locales para que estas puedan decidir si toman posesión de propiedades privadas y ordenan evacuaciones. Victoria, donde los fuegos han causado tres muertos y han calcinado 244 casas desde principios de año, ya ha advertido a sus habitantes de que es necesaria su evacuación antes de que la situación empeore aún más en los próximos días, con un aumento de las temperaturas hasta los 40 grados y fuertes vientos que pueden empeorar la situación de los focos activos.

La catástrofe de incendios que asola Australia comenzó en primavera, antes de la época en que suelen producirse en el país, en este año que la Oficina de Meteorología del país ha catalogado como el más caluroso y seco en Australia.