La cita Despesques 22 trataba de investigar, profundizar y debatir sobre el futuro de la gastronomía y cómo innovar para hacerla más sostenible. Durante dos días, en un entorno idílico como es el Parque Natural de los Alcornocales en Cádiz, el chef multipremiado del restaurante Aponiente, Ángel León, reunió a 80 cocineros de todo el mundo y profesionales de otros sectores como la cultura, para reflexionar, entre otras cosas, sobre el papel que la hostelería deberá asumir en el cambio de paradigmas que estamos viviendo y que poco a poco llega a todos los ámbitos de la vida.
Despesques 2022 y la revolución sostenible en nuestras mesas
Hoy no hay actividad humana que no esté condicionada por la necesidad de ser más sostenible y más consciente. Y una de las cosas que está cambiando en nuestra sociedad es esa conciencia sobre la necesidad de incluir a todos, desde la diversidad y el reconocimiento de las diferencias.
El mundo sostenible que la sociedad demanda está ligado al respeto de todos y cada uno de nosotros, con igualdad de oportunidades. Y en este sentido, gracias a la mediación de uno de los patrocinadores principales del evento, los asistentes pudieron disfrutar de la gastronomía más auténtica de la zona, y seguro que con más salero.
Como extensión del trabajo que ya realiza en apoyo de este colectivo, Reale Seguros hizo posible que cuatro mujeres del barrio de Santiago de Jerez de la Frontera mostraran su arte y su buen hacer en los fogones con un menú tradicional compuesto por garbanzos con langostinos, pochas, alcachofas con papas, croquetas de espinacas con langostinos y Berza de Cardillo.
No hay nada más sostenible que conservar la esencia de un pueblo como el gitano
Como si se tratara de una comida familiar, se emplearon a fondo para elaborar unos platos que, según cuentan, no dejaron indiferentes a nadie. Seguramente muy alejados de las innovaciones de laboratorio con las que sorprenden los chefs premiados a sus clientes, pero compartiendo con total seguridad el amor con el que se trabajan los ingredientes, un gusto por los sabores auténticos, y la dificultad de hacer lo difícil sencillo.
Al fin y al cabo, una de las obsesiones de Ángel León es crear una oferta gastronómica basada en productos de la tierra, lo más ecológicos posibles y con raíces en la tradición, desde la que alcanzar cotas de técnica e imaginación como las que le han merecido sus numerosos premios y distinciones.
