Desde que Pablo Iglesias renunciara primero a la vicepresidencia del Gobierno para presentarse a las elecciones de la Comunidad de Madrid del 4 de mayo y después a la política, ha decidido mantener un perfil bajo. Las apariciones del ex secretario general de Podemos se pueden contar con los dedos de una mano. 91 días después de abandonar la vida pública, el ex líder de los morados ha vuelto para dar una pincelada más en su reciclaje de dirigente político a civil con un cambio en su biografía de Twitter que ha sorprendido a propios y extraños.
El exvicepresidente del Gobierno ya causó sensación el pasado 12 de mayo cuando, de la mano del periodista Pedro Vallín, dejó verse ante el resto del país con un aspecto totalmente renovado. Iglesias se cortó la coleta y se dejó ver como nunca antes se le ha podido observar. Además, aquel mismo día actualizó su biografía de Twitter. “Caballero Jedi, según Vallín”, escribió junto a una cita de uno de los personajes de la mítica serie de HBO The Wire.
Tras ello, hasta el 5 de julio, Iglesias no dio pistas de su paradero desde el anuncio de su renovado aspecto para afrontar su nueva vida lejos de la política. Aquel día, el exdirigente de Podemos reapareció por primera vez en un curso de verano que organizaba la Universidad Complutense de Madrid (UCM).
Casi dos semanas después, Iglesias rompería su silencio mediático en una entrevista concedida al diario italiano La Stampa. A esto se le sumó la publicación de una fotografía del propio ex de Podemos, con apenas 22 años, manifestándose contra el G8 en los aledaños de Génova 13.
Las últimas noticias que España tuvo de Pablo Iglesias estuvieron relacionadas con su futuro profesional. Desde el entorno más próximo al ex vicepresidente segundo del Gobierno filtraron que se incorporaría a un grupo de investigación del centro Internet Interdisciplinary Institute (IN3), adscrito a la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
Sin embargo, desde aquel primer cambio de look, Iglesias no había renovado su cuenta de Twitter, que permanecía inmóvil. Ni publicaciones ni retuits ni favoritos ni cambios de fotografía… La nada más absoluta. No obstante, este martes, Iglesias sí actualizó lo que otrora fuera una herramienta clave para llegar a todos los estratos de la sociedad. Lo hizo con una fotografía con el pelo corto, sin su coleta y con una fotografía de portada de uno de las imágenes que están dejando estos Juegos Olímpicos de Tokio y con un potente significado: el abrazo entre Ana Peleteiro y la venezolana Yulimar Rojas.
