Las estrellas de Disney, con las que muchos crecimos, comienzan a revelarse contra la factoría de sueños que las alzó a la cima mundial. Miley Cyrus, Demi Lovato o Britney Spears fueron de las primeras artistas que levantaron su voz para condenar la fama descontrolada en la que cayeron y que derivó en alcoholismo, abuso de las drogas y enfermedades mentales. A ellas se acaba de unir recientemente Selena Gómez.

La actriz se encamina a tener un hueco brillante en el ámbito cinematográfico de la mano de grandes referentes gracias a la nueva serie de corte cómico que está a punto de estrenarse el próximo 31 de agosto, Solo asesinatos en el edificio ('Only Murders in the Building') en Hulu, compartiendo reparto con Martin Short y Steve Martin. Ante la prensa, Selena Gómez ha valorado las diferencias entre realizar producciones de esta magnitud con sus primeras series con un alegato que no ha dejado a nadie indiferente: “Renuncié a mi vida en favor de Disney siendo muy joven, y no sabía lo que estaba haciendo. Simplemente, me dedicaba a correr por el set de rodaje”, aseguró.

“Resulta muy agradable regresar a la pequeña pantalla y que me den un papel acorde a mi edad real, lo cual es algo que rara vez sucede. No sé si soy una buena actriz, solo me limito a hacer mi trabajo”, añadía con sinceridad, haciendo asimismo balance de algunas realidades del mundo de la interpretación. 

La popularidad de la cantante de ahora 29 años comenzó a ascender desde que era niña gracias a su participación en varios shows infantiles, como Barney & Friends y, posteriormente, en grandes producciones de la casa de Mickey Mouse en la pequeña pantalla, tales como Los magos de Waverly Place, la cual finalizó en 2012. En estos momentos, con una carrera consolidada en el mundo de la música y el cine, Gómez ha decidido dar rienda suelta a destapar toda esa época de forma pública.

No obstante, su repentina fama le afectó a la salud física y mental. La actriz tuvo que someterse a tratamiento psicológico debido a varias crisis emocionales y enfrentarse al lupus, una enfermedad autoinmune que derivó en un trasplante de riñón en el 2017. Además, la artista también tuvo que hacer frente a ser el blanco de la prensa del corazón por su atropellada ruptura con el cantante Justin Bieber.