La ganancia de derechos sociales de los trabajadores activa siempre, desde la abolición del trabajo esclavo, pasando por las reducciones de jornada y hasta el establecimiento de un salario mínimo, la maquinaria de los intereses económicos dominantes y de sus altavoces mediáticos. España no es una excepción y desde la constitución del primer Gobierno de coalición cada avance laboral ha venido sucedido de una ristra de argumentos neoliberales que pronosticaban la debacle económica que nunca se ha cumplido. Este viernes, Óscar Puente ha aprovechado los datos de empleo para atizar a dos de los principales gurús defensores de las élites económicas.
“A este paso, el paro llegará al 35% y 900.000 empresas españolas no llegarán a 2021”, pronosticaba Daniel Lacalle en una entrevista concedida a ElMundo en marzo de 2020. “Subir el salario mínimo sí destruye empleo en España”, garantizaba Juan Ramón Rallo en junio de 2021 en El Confidencial. Varios años han transcurrido desde ambas afirmaciones que, lejos de cumplirse, son antagónicos a la situación económica que atraviesa el país. Estas declaraciones persiguen a sus responsables desde entonces, apareciendo en redes sociales cada vez que un nuevo dato económico se conoce, y el ministro de Transportes ha querido sumarse a la mofa.
“Un gran día para estos dos astros de la economía fetén, que es la liberal-pijo-conservadora”, se ha jactado Puente. “En manos como estas estaríamos, de no estar en las de este Gobierno”, ha añadido. El momento elegido por el titular de la cartera de Transportes y Movilidad Sostenible no es casual, sino que está condicionado por la publicación de la Encuesta de Población Activa (EPA) que ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE) y de la que se desprende un récord del número de ocupados y un nivel de paro no visto, por lo bajo, en 16 años.
Un gran día para estos dos astros de la economía fetén, que es la liberal-pijo-conservadora. En manos como estas estaríamos, de no estar en las de este gobierno. pic.twitter.com/om1xHWqsOM
— Oscar Puente (@oscar_puente_) July 26, 2024
Los datos contra el catastrofismo
El mercado de trabajo español roza ya los 21,7 millones de ocupados, después de experimentar un incremento de 434.700 puestos de trabajo en el segundo trimestre del año (+2,05%). Simultáneamente, el paro se ha reducido en 222.600 personas, lo que representa un descenso del 7,47% entre abril y junio, hasta registrar una tasa del 11,27%, un punto menos que el trimestre anterior, y un total de 2.755.300 parados, la cifra más baja desde 2008.
El máximo de ocupados de toda la historia de España y un paro que recuerda a los momentos previos a la crisis económica de la primera década del siglo han llegado con un Salario Mínimo Interprofesional (SMI) 5.573 euros al año más alto que en 2018, cuando llegó Pedro Sánchez a la Moncloa y Yolanda Díaz al Ministerio de Trabajo. Los trabajadores que menos cobran han pasado de los 735 euros al mes de Mariano Rajoy a los 1.134 euros actuales (en 14 pagas).
Con cada subida del SMI los economistas neoliberales se llevaban las manos a la cabeza y aseguraban el fin de la economía y anticipaban la llegada de cartillas de racionamiento, el desmantelamiento del sistema y la constitución de un régimen comunista bolivariano. Grandes previsiones. Lo mismo sucedió con la publicación de la reforma laboral, centrada en combatir la temporalidad y fomentar los contratos indefinidos. Actualmente, 15,5 millones de trabajadores ya cuentan con esta relación contractual y la temporalidad se ha desplomado hasta el 15,95%, tal y como refleja la EPA de este viernes.
Con todos estos datos, Puente ha aprovechado para poner cara a aquellas voces que no cejan en su intento de atacar toda ganancia de derechos de la clase trabajadora. Esta exposición, no obstante, no frenará a estas personalidades, que volverán a salir raudos en defensa de los grandes poderes económicos en el momento que estos den la voz de alarma ante el drama de tener que pagar con sus “desmesurados beneficios”, según los organismos internacionales, unos salarios mínimamente dignos y que apenas sirven para no morirse de hambre.
