El portavoz de Vox, Javier Ortega Smith, ha sido el centro de atención en las últimas horas después de enfrentarse al portavoz adjunto de Más Madrid, Eduardo Rubiño, y lanzarle una botella en el pleno del Ayuntamiento de Madrid de este viernes.

Rita Maestre, la líder de la formación en la capital, acusó al portavoz de Vox de amenazar al edil de su partido. "Lo agrede físicamente y tiene que dimitir ya", afirmó.

El portavoz de Vox se justificó diciendo que le pediría perdón si él le pedía perdón por lo que le había dicho, tras el acto violento que ha provocado que todos los partidos, incluso el PP, exijan su dimisión.

Pero, de todas las reacciones, la más sorprendente ha sido la de la ex portavoz de Vox en el Congreso, Macarena Olona, desde su cuenta de X. "Sea lo que sea lo que le hayan dicho (o lo que él diga que le han dicho), esto es inadmisible. Este es el mismo señor que hace un mes se encaró con un policía de la UIP en Ferraz siendo diputado", manifestó.

"Un cobarde. Vox ha perdido el rumbo, lo han convertido en un proyecto ineficaz. Su deriva solo conduce a su autodestrucción. Un servidor público no puede actuar como un matón, las ideas se defienden con la palabra", indicó.

Macarena Olona argumentó que ni "la violencia" ni "los violentos" tienen cabida "en democracia". "Que no os confundan, esto no es hombría, es incapacidad. Debe disculparse y dimitir esta misma noche", reprochó.

"Aunque no lo hará, porque buscan el conflicto. Pero esto no es enfrentarse a la izquierda, esto es destruir a la derecha. Con su agresión pierde toda credibilidad su argumento. Asco. Váyase, señor Ortega, váyase", concluyó.

Rubiño tacha a Vox de "matones con traje y corbata" pero advierte que "no les van a amedrentar"

Por otra parte, el propio Rubiño ha tachado a los representantes de Vox de "matones con trabaje y corbata que atacan la dignidad de las personas" pero les ha advertido que "no les van a amedrentar" en su acción política, durante una entrevista en RNE.

El edil de Más Madrid ha recordado que los representantes políticos, además de elaborar leyes, deben ser "un modelo de la sociedad con una actitud ejemplar". "Por eso es tan peligroso lo que hemos vivido ayer, que traspasó todas las líneas rojas, ya que supuso el acto de mayor intimidación y de violencia que yo he vivido en los años que llevo en política, que llevo ya unos cuantos", ha indicado.

Rubiño cree que es un caso más de esa "línea de puntos" que recorre la acción política de Vox constantemente, "que pasa por poner en la diana permanentemente a las personas LGTBI desde las tribunas, por esparcir discursos de odio contra las personas vulnerables, por atacar a quien piensa diferente o por deshumanizar al adversario".

"Es un partido que se ha dedicado, por ejemplo, a decir que había que colgar de los pies al presidente del Gobierno, que ha salido a manifestarse con grupos ultras que portan esvásticas en las calles de este país pidiendo que no se reconociera el resultado de las elecciones generales 23 de julio, y que efectivamente, al final, acaban llevando eso también a una agresión de intimidación".

Una agresión, ha calificado el concejal de Más Madrid sobre lo que sufrió ayer, "que no sabía si iba a pasar a ser física porque se me acercó con una actitud increíblemente violenta propia de un matón de discoteca a las 6 de la mañana".

"Eso es el ejemplo que dan desde las instituciones que obviamente legitima lo que después sucede en las calles. Porque si en estos años hemos visto cómo se han incrementado las agresiones contra las personas LGTBI, o hemos visto cómo estamos sufriendo más delitos de odio que nunca, se debe precisamente a que los matones que antes estaban repudiados por la sociedad, ahora se sienten legitimados por señores con traje y corbata que desde las instituciones provocan ataques a la dignidad de las personas como estos", ha esgrimido.