Durante la campaña electoral del partido naranja y, en particular de su exlíder Albert Rivera, el caniche toy Lucas fue muy sonado. Pero parece que tras conocerse el resultado de las elecciones del pasado 10 de noviembre el perrito Lucas ha abandonado a Albert Rivera, que ha dimitido como presidente de Ciudadanos, y al propio partido. Ni rastro queda de su ferviente actividad en las redes sociales: en su cuenta personal de Twitter publicó su último tuit el mismo día de las elecciones generales cuando afirmaba su entusiasmo: “Hoy muchos vecinos de mi barrio querían hacerse fotos conmigo. ¡Cómo mola vivir en Malasaña!¡Ah!¡Id todos a votar si no lo habéis hecho ya!”

Tuit de Lucas En Marcha el 10N

En Instagram sucedió lo mismo: “Hoy el verdadero protagonista serás tú. Sé que daremos la campanada, como ya hicimos en Cataluña o en Andalucía. ¡Vamos Albert Rivera!¡Sí se puede!”. Esperaban darle un vuelco a los resultados que pronosticaban todas las encuentas, pero no fue así, el descalabro electoral del partido fue importante.

Su fama llegó cuando el exlíder de Ciudadanos, Albert Rivera, publicó el vídeo donde lo presentaba y afirmaba: “Os presento a mi arma secreta para el debate: Lucas, el perro de Pablo Carrión (miembro del equipo de comunicación) que estamos por aquí empezando a preparar el debate, que es para comérselo, aún huele a leche, es un bebito”. A partir de este momento, las redes se incendiaron con una infinidad de memes. El vídeo se volvió viral y con ello aparecieron sus cuentas personales: @LucasEnMarcha, donde su actividad fue notoria durante toda la campaña electoral, pero vistos los malos resultados del partido naranja (solamente consiguió 10 escaños, perdiendo un total de 47) el perrito Lucas parece haber pasado a un segundo plano, igual que el hoy exlíder del partido tras su dimisión y poner fin así a su vida política.