El eurodiputado de Vox Hermann Tertsch se ha pronunciado sobre el revuelo que se ha generado al filtrarse algunas escenas del rodaje de la nueva película de Torrente, en las que el personaje cinematográfico ideado e interpretado por Santiago Segura parodia a Vox y a la ultraderecha. Tertsch ha valorado la situación y ha trasladado lo que opina del propio Santiago Segura.
Sin citar ningún otro tuit y adjuntando una foto de Santiago Segura en un photocall, el ultraderechista ha defendido, sorprendentemente, la labor del director nativo de Carabanchel. "El único director español que se paga sus facturas y no nos parasita a los españoles puede hacer lo que le dé la gana con sus guiones y sus películas en general", ha señalado, lanzando un dardo velado a otros cineastas que se benefician, con todo derecho, de la apuesta pública por la cultura.
A pesar de esta primera defensa, Tertsch ha reconocido que hay que esperar a que salga la película y una vez lo haga, se podrá opinar con más coherencia: "Después, cuando la película se estrene, que cada cual juzgue".
"Tampoco necesita Vox que Santiago Segura le haga publicidad. La publicidad a Vox se la hace la realidad, no la ficción", ha opinado finalmente el eurodiputado ultraderechista.
El único director español que se paga sus facturas y no nos
— Hermann Tertsch (@hermanntertsch) August 14, 2025
parasita a los españoles puede hacer lo que le dé la gana con sus guiones y sus películas en general. Después, cuando la película se estrene, que cada cual juzgue.
Tampoco necesita VOX que Santiago Segura le haga… pic.twitter.com/LzRHuazSOq
Tertsch, siempre muy activo en redes, se llevó esta semana un repaso de Sergio del Molino, que firmó en El País un texto titulado No hay un solo militante de Vox más español que yo, en el que cuestionaba el uso de consignas políticas como “los inmigrantes no se integran” o “los inmigrantes no acatan nuestras costumbres”. El escritor ha argumentado que, en una sociedad abierta y plural, no existe una obligación de integrarse bajo determinadas tradiciones y que la ciudadanía española no admite grados.
"Obligar a alguien a acatar costumbres supondría exigir a los inmigrantes un requisito al que ningún ciudadano está obligado. Yo soy tan español como Santiago Abascal —porque la ciudadanía española es una condición absoluta que no admite grados, nadie puede ser más español que nadie— y no acato casi ninguna de las costumbres que, según su partido, conforman la identidad nacional", escribía del Molino, unas palabras que no le sentaron nada bien a Tertsch.
"Este es un tonto con balcones. Nada más. Y debe creer que ha escrito algo especial este majadero", le espetó el ultraderechista. Pocas horas después, Sergio del Molino ha respondido con ironía desde su cuenta de X (antes Twitter): “Recibo cartas de amor de los españoles más admirables. Gracias, @hermanntertsch, el cariño es mutuo. Tómate una (o las que lleves ya) a nuestra salud”.