Arabia Saudí acelera los plazos para sacar adelante uno de sus planes más ambiciosos: The Line, una gigantesca metrópolis lineal de 170 km que será el hogar de nueve millones de personas. Se priorizará la tecnología, la agricultura vertical y las energías 100% renovables.

En The Line no se apuesta por el urbanismo horizontal ni por el desarrollo vertical. Ambas filosofías se unen en una solución que suena irreal: la clave del proyecto serán dos gigantescas estructuras de cristal que harán de pared de la ciudad, y que se elevarán hasta los 500 metros de altura. La anchura entre ambas será de tan solo 200 metros, distancia en la que entrarán todos los edificios.

Este planteamiento ya fue impulsado a principios de 2021 por el Príncipe de Arabia Saudí, Mohammed bin Salman, pero ahora se ha querido dar un paso más y presentar con más detalle su espectacular proyecto

La construcción, a su vez, es la joya de la corona de un proyecto aún mayor, NEOM, en la provincia de Tabuk, un proyecto de 300.000 millones de dólares a través del cual Arabia Saudí pretende transformar una vasta zona desértica en una gran zona urbana.

El objetivo de The Line es que cada uno de los residentes pueda cubrir sus compras y tareas diarias en un paseo de cinco minutos.

Interior de The Line. NEOM.

Una de las preocupaciones podría ser el de moverse dentro de la metrópoli, ya que no habrá coches. Gracias al sistema de transporte público, un tren de alta velocidad, se prevé que no se tardará más de 20 minutos en llegar de un extremo al otro. Una de las grandes ventajas en este sentido es la reducción de la huella medioambiental.

“Ofrece un nuevo enfoque para el diseño urbano: la idea de superponer las funciones de la ciudad verticalmente mientras brinda a las personas la posibilidad de moverse sin problemas en tres dimensiones: hacia arriba, abajo o transversalmente”, afirma la agencia estatal saudí SPA.

Cincuenta años de desarrollo

En términos de tamaño y dimensiones, los datos publicados por las autoridades sauditas sugieren que toda la metrópolis tendrá alrededor de 500 metros de alto y 200 metros de ancho, extendiéndose a lo largo de una línea de 170 km. Dentro, los residentes encontrarán un microclima templado, con fuentes de agua y energía 100% renovables. También se destaca su ubicación estratégica, que le conectará al 40% de la población mundial con un vuelo de menos de seis horas.

Sobre las fechas previstas, a comienzos de 2021 los técnicos estimaban que Mirror Line debería afrontarse por etapas y que el desarrollo podría prolongarse hasta los cincuenta años.

The Line tendrá una extensión de 170 kilómetros. NEOM.