El usuario de Twitter @jlvrede ha escrito una serie de mensajes, desde la experiencia personal, definiendo el drama que pueden suponer para una familia los juegos, gratuitos, aunque en realidad no lo son. Del mismo modo, llama la atención sobre aplicaciones online desarrolladas por empresas de apuestas como Luckia. 

Sus textos alertan, además, sobre el necesario control parental y el uso de cuentas bancarias para potenciar los juegos presuntamente gratis: