La exministra de Defensa y exsecretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, dimitió tras situarse en el epicentro de las cloacas del Estado gracias a sus tejemanejes y los de su marido, Ignacio López del Hierro, con el comisario retirado José Manuel Villarejo. Desde entonces, poco o nada se sabe de ella. Hasta ahora.
Según publicó El Confidencial, Cospedal fue una de las personalidades que acudió el pasado 11 de mayo a la sesión vespertina, que enfrentó a Rafael Nadal con el griego Stéfanos Tsisipas.
Cospedal ha reaparecido en uno de los momentos más delicados para Pablo Casado, quien logró la presidencia del PP en la segunda vuelta gracias a su apoyo. Tras el batacazo en las elecciones generales del 28A, el líder popular encara las europeas, autonómicas y municipales con una nueva cara, buscando el centro del tablero (ahora ya sí que Casado califica a Vox de extrema derecha).
Javier Maroto y Teodoro García Egea, los hombres fuertes de Casado, fueron los cabezas de turco para devolver al PP al centrismo que encarnaba Mariano Rajoy. El viraje ha sido tal que el propio Casado ha escondido a José María Aznar y ha dado mayor relevancia a Rajoy.
