Puente aplaude al nuevo alcalde de Nueva York tras escuchar lo que han dicho de él en Israel: "Lo está bordando"

Este pasado miércoles 5 de noviembre Nueva York asistía a un hito histórico con la elección como nuevo alcalde a Zohan Mamdani. El candidato demócrata rompía los esquemas preestablecidos al derrotar al republicano respaldado por Donald Trump, Curtis Sliwa, y, especialmente, al convertirse en el primer alcalde musulmán en la historia de Nueva York, precisamente en un momento en el que la inmigración constituye uno de los debates más candentes en Estados Unidos bajo el mandato de Trump.

Con esto último como telón de fondo, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha querido pronunciarse por donde acostumbra a hacerlo de forma informal, en su cuenta de X (antes Twitter), pero con motivo, además, de la reacción que ha despertado en Israel la elección de Mamdani como nuevo regidor de Nueva York. Según publicaba la cuenta Global Updates, dedicada a compartir información internacional, tendencias, política y deporte, el pasado martes -jornada previa a conocerse los resultados electorales- los israelíes lanzaban un aviso: no visitarían nunca más la ciudad de Nueva York si Mamdani se hacía con la alcaldía. 

Al hilo de ello, el titular de la cartera de Transportes ha compartido un escueto pero contundente mensaje en esta red social en referencia a Mamdani: “Lo está bordando, y ni ha empezado”. Con ello, el ministro ha tirado en parte de sátira para celebrar que, con el nombramiento del nuevo alcalde, los israelíes -bajo el punto de mira de la justicia internacional en los últimos meses por el genocidio que han perpetrado sobre Palestina- no se desplazarán más hasta Nueva York.

Lo está bordando, y ni ha empezado. https://t.co/BgtZR2ZVjI

— Óscar Puente (@oscar_puente_) November 7, 2025

Historia en Estados Unidos

Tras los resultados electorales, Mamdani se imponía en los comicios de una de las principales ciudades del mundo tanto a Sliwa como Andrew Cuomo, un exdemocráta que había presentado una candidatura independiente. En el momento en el que se rozaba el 100% del escrutinio después de que dos millones de neoyorquinos acudieran a las urnas, Mamdani ya contaba con un 50,4% de apoyo de la ciudadanía, dándole la victoria al haber obtenido Sliwa el 41,6% y Cuomo el 7%.

Sin mostrar temor a Donald Trump y sus conflictivas acciones contra los inmigrantes residentes en Estados Unidos, Mamdani celebraba encontrar el apoyo de los vecinos de la ciudad más poblada de Estados Unidos y subrayaba su perfil como líder "joven, musulmán, socialista democrático". No solo eso, sino que en su discurso como alcalde electo aseguraba que se negaba a disculparse por su raza y celebraba que en los últimos meses de campaña aquellos que cuentan con manos que hallan "dedos magullados de levantar cajas en el almacén, palmas callosas por el manillar de las bicicletas de reparto y nudillos con cicatrices de quemaduras en la cocina" hayan podido "atreverse a aspirar" a la alcaldía de esta metropoli. Es más, lejos de achantarse ante Trump, Mamdani reivindicaba el papel de aquellos que habían llegado a EE.UU para labrarse un futuro mejor

En este sentido, Mamdani entendía su triunfo como la aspiración ciudadana para dar lugar a un cambio y que se impulse un "mandato para una nueva política, un mandato para una ciudad que podamos costear y un mandato para un gobierno que lo haga realidad", destacaba en una comparecencia de algo menos de media hora en la que recordó a aquellos a quienes la política neoyorquina "suele olvidar, pero que hicieron suyo este movimiento". 

Asimismo, Mamdani destacó su voluntad de abordar la "crisis" del coste de vida, congelar los alquileres para "más de dos millones" de inquilinos y brindar "cuidado infantil universal" en toda la ciudad. Además, prometió contratar "miles de maestros más" y reducir "el despilfarro de una burocracia excesiva", así como colaborar con la Policía para reducir la delincuencia y crear un "departamento de seguridad comunitaria que aborde de frente" la crisis de salud mental y el sinhogarismo. Paralelamente, se dirigió a las minorías que en reiteradas ocasiones han sido diana de las críticas y políticas de la Administración Trump.