Últimamente, nos pasamos el día hablando [y escuchando] de cómo está avanzando la inteligencia artificial en esta década. Y, aunque es verdad, no es la única innovación tecnológica que ha cambiado el siglo XXI.
Hoy, hemos recapitulado las 10 más interesantes, en términos de haber supuesto un cambio real en nuestras vidas. La verdad es que, cuando se ven así, en conjunto, hay que reconocer que llevamos un cuarto de siglo de lo más interesante en este aspecto.
Muchas de las aplicaciones actuales son el resultado de la fusión de varias tecnologías
Innovaciones que cambian todo
Que conste que no hemos buscado ordenar estas innovaciones por ningún tipo de criterio: no se puede decir que unas sean más importantes que otras, ni que el impacto sea mayor.
De hecho, en muchos casos, el verdadero valor surge de la combinación de varias de ellas. Y muchas de las aplicaciones y herramientas que utilizamos cada día en nuestra vida personal y profesional son el resultado de esa fusión de tecnologías.
En la nube
Está claro que en esta lista tenía que estar la computación en la nube (Cloud Computing). Aunque no nació este siglo, sí ha sido cuando ha alcanzado su mayor esplendor.
Los mayores usuarios son el sector financiero y los gobiernos. Pero, por supuesto, ya prácticamente todas las empresas en países como el nuestro cuentan con algún tipo de servicio en la nube.
Las ventajas son muy claras: es más barato, consume menos energía y recursos, aumenta la productividad y pone cualquier tipo de tecnología al alcance, tanto de organizaciones multinacionales, como de pequeñas empresas.
Los grandes “triunfadores” de esta tecnología son AWS (Amazon Web Services), Microsoft Azure y Google Cloud, que acaparan la práctica totalidad del mercado.
Big Data
Una de las consecuencias de la utilización de la tecnología en la nube es la posibilidad de recabar y analizar grandes cantidades de datos. Una vez más, no se trata de una tecnología nacida en este siglo. Ya en 1989, Erik Larson utilizó el término por primera vez, en un artículo sobre marketing. Pero la verdad es que el concepto no era el mismo que consideramos hoy.
La capacidad de recoger, almacenar y analizar grandes volúmenes de datos ha cambiado radicalmente la toma de decisiones en muchas industrias, desde la salud hasta las finanzas.
Por eso, ahora la mayoría de decisiones se basan en datos. Un modelo que ha sustituido muchas decisiones intuitivas y ha impulsado avances en inteligencia artificial y predicciones de mercado.
Inteligencia artificial y aprendizaje automático
La IA y el aprendizaje automático (Machine Learning) permiten que las máquinas "aprendan" y mejoren con el tiempo sin necesidad de programación explícita, lo que ha dado lugar a avances en áreas como el reconocimiento de voz, procesamiento de imágenes y vehículos autónomos.
Esta tecnología también nació en los años 90, pero en la década de los 2000 y, en especial, en las de los 10 y los 20 de este siglo ha sido cuando se han desarrollado con mayor fuerza.
Blockchain
Blockchain es mucho más que la tecnología en la que se basan las criptomonedas como Bitcoin. Su verdadera revolución ha sido permitir la creación de registros digitales inmutables, distribuidos y seguros, sin necesidad de una entidad central de confianza.
No solo ha transformado el sistema financiero, sino también otros muy diferentes, como la propiedad intelectual y el gobierno digital. En el mundo del arte, los NFTs han revolucionado la forma de relación de los artistas con sus posibles clientes.
El NFT más caro jamás vendido es "The Merge" de Pak. Esta obra de arte digital se subastó en diciembre de 2021 por la impresionante suma de 91,8 millones de dólares. Lo que lo hace tan especial es que se trata de una obra colectiva, en la que miles de compradores pudieron adquirir fragmentos del NFT y unirse a una comunidad en constante evolución.
Internet de las Cosas (IoT)
Las previsiones apuntan a que en 2030 habrá más dispositivos que personas conectados a internet. Desde electrodomésticos, hasta sensores para la agricultura, ciudades inteligentes o wearables para monitorizar la salud, el IoT ha hecho realidad muchas imágenes que habíamos visto en las películas de ciencia ficción.
Sin embargo, el primer dispositivo de IoT de la historia fue una máquina expendedora de Coca-Cola conectada a internet, en la década de 1980.
Redes sociales
En 1995 nació Classmates.com, una plataforma que permitía conectar con antiguos compañeros de clase. Y en 1997, aparece SixDegrees.com, que es considerada por muchas personas como la primera red social contemporánea, con la capacidad de crear perfiles y tener listas de amigos.
Pero el año clave es el 2000, en el que MySpace, Facebook, Twitter y LinkedIn revolucionan la manera de relacionarnos y comunicarnos. En la actualidad, más de la mitad de la población mundial usa al menos una red social.
El impacto de estas plataformas se ha extendido prácticamente a todas las áreas de nuestra vida, desde cómo conocemos a nuestras parejas, hasta cómo compramos y vendemos.
Por el camino -bien por errores en las decisiones empresariales, bien por la lucha de los gigantes del sector para acabar con la competencia, se han quedado algunas que en su momento “lo petaron”, como la propia MySpace, Hi5, Google+, Vine y, en España, Tuenti.
5G
En países como España, la mayoría de las personas podemos disfrutar de conexiones 5G y nos hemos acostumbrado a su velocidad y las otras ventajas que aporta, como la menor latencia y la capacidad para convertirse en la plataforma sobre la que construir todo tipo de aplicaciones.
Se espera que esta tecnología siga revolucionando las ciudades, con herramientas para gestionar el tráfico, la energía, la seguridad o la gestión de recursos, entre otras cosas.
En este caso, sí se trata de una tecnología nacida en este mismo siglo. Los estándares se aprobaron oficialmente en 2018 y las primeras redes se desplegaron a finales de ese mismo año.
Sin embargo, al 5G todavía le queda mucho camino por recorrer. Está en plena evolución y veremos muchas más aplicaciones basadas en sus capacidades.
Ciberseguridad Avanzada
A medida que aumentan las ciberamenazas, las innovaciones en ciberseguridad, como la autenticación multifactor [MFA, por sus siglas en inglés], la detección de amenazas con IA y la criptografía avanzada, han sido esenciales para proteger datos y sistemas críticos.
La MFA requiere más de una forma de verificación para acceder a un sistema o aplicación. En lugar de depender únicamente de una contraseña, añade una o varias capas adicionales de seguridad, como un código de un solo uso enviado a tu teléfono móvil, una huella digital o un reconocimiento facial.
En esencia, la criptografía avanzada se encarga de cifrar la información para transformarla en un código ininteligible para quienes no posean la clave adecuada. Se utiliza para proteger los datos personales y las comunicaciones.
Realidad Aumentada (AR) y Realidad Virtual (VR)
La AR y la VR han cambiado la forma en que las personas experimentamos el mundo digital. Se aplican en áreas como videojuegos, simulación médica, diseño arquitectónico y formación profesional.
Los dispositivos más conocidos para estas experiencias están Oculus Rift, Microsoft HoloLens y aplicaciones de AR en teléfonos móviles.
Ambas han supuesto un cambio de paradigma porque han permitido la creación de experiencias inmersivas que mezclan el mundo físico con el digital, lo que ha abierto nuevas posibilidades en entretenimiento, educación y la industria. Si no te lo crees, puedes ver esta noche Ready Player One y hacerte una idea de hacia dónde van estos desarrollos.
Kubernetes
Probablemente, ni siquiera lo habías escuchado nunca. Pero Kubernetes se ha convertido en una herramienta fundamental en el mundo de la tecnología actual. Se trata de una plataforma de código abierto para la automatización del despliegue, escalado y manejo de aplicaciones en contenedores.
En realidad, lo que hace es gestionar y organizar todas las aplicaciones, de forma más escalable y eficiente. Además, garantiza que estén siempre disponibles, incluso en caso de fallos. También perite ahorrar costes y energía. Está respaldado por grandes empresas tecnológicas como Google, Microsoft y Amazon.
Nació de un proyecto interno de Google, denominado Borg, que nació en 2003. Pero, hasta 2013 no aparece Omega, la evolución del modelo. En 2014 surge Kubernetes, basado en esta tecnología. Y en 2015 surge la versión 1.0 de Kubernetes, con la creación de la Cloud Native Computing Foundation.