La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, se ha reunido este lunes con las diferentes asociaciones de autónomos para abordar los problemas del sector, así como diseñar una respuesta socioeconómica al impacto del coronavirus. Las reuniones han tenido lugar de forma telemática, con la presencia física de la ministra y de Maravillas Espín, directora general de Trabajo Autónomo, Economía Social y Responsabilidad Social de las Empresas.

A lo largo de la mañana se han reunido con la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), con la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) y la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae), todos ellos centrados en buscar una solución para el sector en medio de la crisis del coronavirus.

Tal y como ha reconocido la ministra en su cuenta de Twitter, “acordamos mantener abierto el diálogo social, realizar una agenda común para impulsar su actividad y abordar las siguientes fases del Covid-19”. Asimismo, Díaz ha destacado dos fases diferentes: “una primera fase de excepcionalidad atenuada y una segunda de normalización atenuada”.

Peticiones concretas

Por un lado, Lorenzo Amor, presidente de ATA, ha pedido que se abonen las prestaciones extraordinarias “con urgencia” a los autónomos beneficiarios, así como que se proceda a las devoluciones “de inmediato” de las cuotas de marzo, ingresadas de forma “indebida”, según el representante de los autónomos.

En esta línea, también ha solicitado la exoneración de la cuota de autónomos desde el primer día para aquellos que estén de baja por el coronavirus o en cuarentena, que se acelere la tramitación de los ERTES y que se garantice el acceso “automático y rápido” a la prestación por desempleo de los trabajadores afectados.

En concreto, Lorenzo Amor ha propuesto a la ministra de Trabajo la reducción en la caída de la facturación hasta el 40%, desde el 75%, para acceder a la prestación por desempleo y la necesidad de ayudar a los autónomos fijos discontinuos, además de una tarifa plana de 100 euros durante seis meses después del estado de alarma para aquellos autónomos que no se beneficien de la prestación extraordinaria.

Por otro lado, Uatae ha pedido al Gobierno un plan especial para el comercio, la hostelería y el turismo por ser los sectores más perjudicados por el coronavirus. La secretaria general de Uatae, María José Landaburu, ha puesto en relieve la importancia de la rapidez y la eficacia de las medidas y también solicita reducir el umbral de pérdida de ingresos del 75% al 40% para el acceso a la prestación extraordinaria con exoneración de cuota.

También Eduardo Abad, presidenta de UPTA, ha solicitado reducir este umbral, en este caso hasta el 50%, para poder acceder a la prestación por cese de actividad y la inclusión de la moratoria para los alquileres de establecimientos. “Hemos hecho un ejercicio de como se va a desarrollar la descongelación de la economía”, asegura Abad, que apuesta por la digitalización para la recuperación económica.