Despido improcedente
El FROB decidió despedir a ambos sin derecho a indemnización, por lo que Todó y Massana denunciaron al nuevo propietario de Catalunya Caixa ante el juzgado de lo Social número 8 de Barcelona por despido improcedente. El juez les ha dado la razón porque "no queda acreditado" que incurrieran en incumplimientos o dejación de funciones, según consta en la sentencia. El FROB acusó a ambos directivos de graves hechos en las cartas de despido que les envió, pero en la sentencia judicial se establece que esas cartas de despido "carecen de hechos concretos y determinados que puedan reflejarse". A esto se añade que el FROB no solicitó la realización de pruebas periciales que probaran las irregularidades de las que se acusaba al es presidente y al ex consejero delegado.
O readmisión o 1,2 millones
El titular del juzgado de lo Social número 8 de Barcelona condena al FROB a readmitir a los directivos despedidos o a indemnizarle con 600.000 euros a cada uno de ellos, lo que supondría un desembolso de 1,2 millones de euros de las arcas del Estado. El ministro de Economía, Luis de Guindos, se apresuró a manifestar a los medios de comunicación que el FROB recurrirá la sentencia que es un varapalo al ministro, de quien realmente depende el FROB, por una gestión que en su día se consideró apresurada o realizada de forma chapucera.