El Ministerio de Trabajo y Economía Social ha lanzado a consulta pública un anteproyecto de ley para la transposición de dos directivas europeas referidas al derecho de los trabajadores a la previsibilidad y transparencia de sus condiciones laborales. De aprobarse el texto, el ordenamiento jurídico español pasará a garantizar estos derechos. El anteproyecto permanecerá en fase de consulta pública durante dos semanas, desde el martes 14 de junio hasta el próximo martes 28.

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Concretamente, este anteproyecto transpone las directivas europeas sobre condiciones laborales transparentes y previsibles y sobre conciliación de la vida familiar y la vida profesional de los progenitores y los cuidadores, ambas de 20 de junio de 2019. Con la asunción de estas directivas, se actualizará la lista de elementos esenciales del contrato de trabajo sobre los que los trabajadores deben recibir información por escrito.

"Los mercados laborales han experimentado profundas modificaciones inducidas por los cambios demográficos y la digitalización, que han conducido a la creación de nuevas formas de empleo, que, a su vez, han fomentado la innovación, la creación de empleo y el crecimiento del mercado laboral", expone el texto sometido a consulta.

En consecuencia, el objetivo del anteproyecto es establecer un marco informativo adecuado que garantice el derecho a la previsibilidad de las condiciones de trabajo en consonancia con las nuevas realidades productivas y empresariales y de los nuevos hábitos de consumo en el marco de la digitalización y nuevas formas de trabajo. "Existe una creciente necesidad de que las personas trabajadoras dispongan de información completa respecto de sus condiciones de trabajo esenciales y que se facilite a su debido tiempo y por escrito de una forma fácil acceso", añade el texto.

La transposición de esta directiva no se centra únicamente en la previsibilidad, sino que también incorpora nuevos derechos básicos relativos a la seguridad en las relaciones laborales, la convergencia creciente entre los distintos Estados miembros y la preservación de la flexibilidad del mercado laboral. La norma también refleja el derecho al empleo en paralelo, por el que se impide al empleador o empresario prohibir a un trabajador la aceptación de un empleo ofrecido por otros empleadores fuera del calendario de trabajo establecido o someter al trabajador a un trato desfavorable por ese motivo.

"Los cambios en el mercado de trabajo han generado nuevas formas de empleo no regulares, con una situación de mayor incertidumbre sobre los derechos de los trabajadores, que han incrementado la necesidad de que éstos dispongan de una información por escrito efectiva y completa de sus condiciones esenciales de trabajo, reduciendo la excesiva flexibilidad de la directiva 91/533", señala el texto. Esta directiva anterior otorgaba a la mayoría de los trabajadores de la UE su derecho a recibir información por escrito sobre sus condiciones de trabajo, aunque lo cierto es que no se aplica a todos los trabajadores.