Los sindicatos exigen garantías en la adopción de medidas de prevención adicionales derivadas del coronavirus en todas las obras de la construcción que permanezcan activas, así como la determinación por parte de la Inspección de Trabajo de su idoneidad para seguir con la actividad.

En concreto, CCOO de Construcción y Servicios y la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT defienden la continuidad de la actividad en aquellas obras de infraestructuras críticas y de mantenimiento de instalaciones que sean esenciales para la población o de primera necesidad, es decir, sanidad, energía, agua, gas o transporte, con el objetivo de evitar la propagación del virus entre los trabajadores del sector.

La situación de excepcionalidad generada por la expansión del COVID-19 obliga al sector de la construcción a extremar las medidas establecidas en los protocolos sanitarios para garantizar las condiciones de seguridad y protección de la salud de los trabajadores que intervienen en la obras y que pueden verse afectados por la continuación de la actividad.

Tanto UGT FICA como CCOO de Construcción y Servicios exigen la incorporación de las actividades de empresas constructoras, subcontratas, distribuidoras y empresas de materiales de construcción a las excepciones del Real Decreto del Estado de Alarma en todo aquello que no se refiera a infraestructuras críticas o al mantenimiento de instalaciones esenciales o de primera necesidad.

Así, piden la paralización de la actividad por causa de fuerza mayor y aseguran: "Desde CCOO de Construcción y Servicios y UGT FICA vamos a hacer todos los esfuerzos que estén en nuestra mano para evitar la expansión de la pandemia, asegurar la salud de nuestros trabajadores, y salvaguardar la economía y a las empresas de nuestro país. Es mucho lo que nos jugamos y no podemos bajar la guardia".