Jordi Sevilla, ex ministro socialista de Economía y senior advisor de Contexto Económico de Llorente y Cuenca ha hecho un claro llamamiento a la clase política por la actual situación macroeconómica de España. El que fuera ex ministro pide “un ataque de sensatez” a los políticos, sin hacer referencia a ningún partido concreto, ya que, desde su punto de vista como experto de LLYC, “la economía está más frágil de lo que parece”.

“Vivimos momentos confusos en la política y momentos no menos confusos en la situación económica”, comienza su análisis mensual de Contexto Económico. El experto reconoce que la economía española crece más que la media europea, pero incluye un matiz en su estudio: “dentro de una tendencia general de clara y continuada desaceleración”. “Lo hacemos con pies de barro, porque son otros, los de fuera, quienes nos hacen crecer en base a las exportaciones y al turismo. La demanda externa tira de nosotros, pero cada vez con menos fuerza”, explica el experto económico sobre la situación macroeconómica española.

“Nos deja una sana situación de balanza de pagos que permite ir reduciendo la deuda externa, lo que es positivo” -continúa el ex ministro económico y responsable de la Administración Pública- “pero a la vez refuerza la ya creciente dependencia de nuestra economía respecto al sector servicios, cuyo auge está representando el papel jugado por la construcción a principios de siglo”. Una “dependencia” de la que alerta el experto y es que esta circunstancia fue precisamente la que dejó a España en un mal lugar tras la crisis sanitaria del coronavirus. Sevilla advierte ahora que la apuesta nacional por “una economía verde y digital” no termina de tener un impacto significativo “ni a la productividad, ni al PIB, ni al empleo”.

La economía española crece por la demanda externa

Precisamente este lunes el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado el avance de la Contabilidad Nacional Anual de 2022, mejorando el dato del Producto Interior Bruto (PIB) de 2022. Según las cifras oficiales de la oficina de Estadística, el PIB nacional avanzó a un ritmo del 5,8% respecto a 2021, mejorando todas las previsiones y colocando a la economía española en lo más alto de las clasificaciones europeas. Estadística ha revisado también el crecimiento en volumen del PIB en 2021, con nueve décimas al alza hasta el 6,4%. 

Los datos publicados este lunes por el INE confirman ya la recuperación total del PIB prepandemia en la economía nacional. Con las subidas de los dos últimos años, un 5,8% en 2022 y un 6,4% en 2021 -dos cursos consecutivos que ha conseguido revertir la caída del 11% de 2020- los datos confirman que lo peor ha pasado. No obstante, los datos ratifican la alerta del ex ministro y es que, en 2022, el aporte fue menor de lo esperado en la demanda nacional, un 2,9% frente al 3,1% estimado previamente, y mayor para la demanda externa, un 2,9% frente al 2,4% inicial. 

Sevilla advierte del impacto de la inflación en "las familias más humildes"

El senior advisor de Contexto Económico de Llorente y Cuenca alerta también en su informe mensual que la inflación -que reconoce menor que la media europea- “golpea con más fuerza la capacidad adquisitiva de las familias más humildes”. “Salimos de esta crisis a dos velocidades sociales, lo que reduce la capacidad adquisitiva de gran parte de las familias, agota sus ahorros y les hace más difícil todavía acceder a la compra de bienes básicos encarecidos”, advierte tras el constante encarecimiento de los productos y alimentos básicos de la cesta de la compra.

Al encarecimiento de los bienes considerados “básicos” para las familias, Sevilla suma la “fuerte” subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE), en el 4,5% tras el último cambio formalizado hace apenas unos días. Una subida que, según el experto, “empieza a notarse ya atenuando la inversión, excepto la extranjera, que sigue pujante”. Para Sevilla, esta inversión extranjera no parece ser suficiente para asegurar la buena marcha económica española y advierte de los problemas del futuro más próximo, especialmente en un momento político más que convulso tras el resultado de las elecciones generales del pasado 23 de julio.

“Datos y tendencias confusos en la economía que exigirían tranquilidad y acuerdos en el contexto político, cuando lo que tenemos es todo lo contrario. Confiemos en que al final se generalice un ataque de sensatez, porque la economía está más frágil de lo que parece y no creo que vaya a mejorar en los próximos meses”, advierte tajante el ex ministro socialista a toda la clase política, sin hacer referencia a ningún partido concreto.