El sector ecuestre mantiene un total de 149.863 puestos de trabajo al año, con un movimiento económico de más de 7.392 millones de euros en el conjunto de todas las actividades relacionadas. Según las cifras del II Estudio del impacto económico del sector ecuestre en España, hay 188.286 exportaciones con un total de 722.158 caballos. Del total, 157.262 están destinados a la cría, 110.722 animales a la transformación y, el mayor grueso, 454.174 caballos corresponde a la explotación, una vez el caballo esté preparado para ello. 

El impacto del sector en la economía española asciende hasta los 7.392 millones de euros, de los que 5.777 millones corresponden a un impacto directo e indirecto -que confluye en un aumento de la renta de los hogares, con el consiguiente crecimiento del consumo- y otros 1.615 millones de euros tienen que ver con el impacto inducido. Las cifras representan un 0,59% del PIB total, con un retorno fiscal de 1.138 millones de euros. Así, cada euro de gasto en el sector ecuestre contribuye con 1,17 euros al PIB nacional, 0,091 euros de IRPF, 0,023 euros del Impuesto de Sociedades y 0,065 euros de IVA.

El informe desglosa las cifras económicas por actividad, con el mayor impacto en la explotación del animal, con más de 5.110 millones de euros. Esta es la fase de vida del caballo en la que se concentra tanto el mayor número de caballos (63%), como el impacto económico (69%). En este caso, el deporte es la actividad más representativa de la última fase, con alrededor del 60% de gasto y emplea a 96.485 personas en un año.

Dentro de esta última fase destacan cuatro actividades clave, lideradas por el deporte. El bloque destinado a deportes supone un gasto de 2.487 millones de euros, concentrando licencias, clubes hípicos, competición y carreras. Le sigue el ocio, con un gasto de 1.808 millones de euros, destinados al turismo ecuestre, espectáculos y fiestas populares en torno al caballo, así como fincas privadas. Por otro lado, las terapias ecuestres suponen un gasto de 5,3 millones de euros y los 134 millones de euros restantes corresponden a la formación, a los caballos de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FFCCSE) y al sector cárnico.

La fase de explotación lidera el impacto económico

Por debajo quedan las fases iniciales en la vida del animal, la cría y la transformación, con 769,9 millones y 780,1 millones de euros respectivamente. La primera fase ha experimentado un fuerte crecimiento frente a la primera edición del estudio, con casi un 7,5% más y un aumento del 68% en el censo de razas puras, es decir, 64.408 ganaderías activas en los Libros Genealógicos. Esto representa más de un 10% del gasto total y emplea a 17.588 personas en España.

Por otro lado, la segunda fase en la vida del caballo -la transformación hacia su explotación- supone unos ingresos de 780,15 millones de euros, con un fuerte aumento frente al número de caballos -un 16% más- y económico (69%). Esta tendencia se produce gracias al aumento en el nivel de cualificación por los perfiles dedicados a esta fase. A nivel laboral, emplea a 16.569 personas a nivel anual.

Además de los ingresos derivados principalmente de la actividad con caballos, hay una serie de actividades transversales que aumentan las cifras, un total de 731,98 millones de euros. Entre otras actividades destaca la industria alimentaria, veterinaria, herradores, equipamiento, construcción, compraventa, seguros, transporte, medios de comunicación o subvenciones.

El sector presenta grandes diferencias según el territorio y Andalucía lidera el ranking, con el 27% del gasto total nacional. En cifras, supone más de 1.500 millones de euros y representa el 32% del censo equino. Por detrás de Andalucía se sitúa Castilla y León en la fase de cría, con un gasto de 73,16 millones de euros, y Cataluña en la fase de transformación, con un gasto de más de 96 millones de euros.

Las cifras quedan por encima en la fase de explotación, con Madrid, la Comunidad Valenciana y Castilla y León a la cabeza, con 818,5 millones, 789 millones y 450,2 millones de euros respectivamente. Siguiendo con esta tendencia, también Andalucía lidera el ranking de censo equino por comunidades autónomas, con el 32% del total. Le siguen Castilla y León (10%), Galicia (6,4%) y Extremadura (6,3%).