El mes de julio es un mal mes para el consumo energético. La bombona de butano alcanza los 15,37 euros, el precio más alto de los últimos seis años. Esta subida se suma a los niveles máximos del precio de la luz y el combustible en un mes de julio candente para las familias. Desde el pasado mes de noviembre el precio del butano no ha dejado de encadenar subidas consecutivas, siempre en el umbral del maximo permitido.
Esta última subida ha supuesto un incremento del 4,99% respecto al precio anterior, lo que se traduce en 73 céntimos más por bombona. Es decir, en tan solo 8 meses la bombona ha pasado de costar 12,09 euros a 15,37 euros. "Esta subida de un 27% en pocos meses es un claro ejemplo de los fuertes vaivenes que experimentan los precios del butano desde que se estableció el sistema actual" asegura la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
Además, una subida en el precio del butano en pleno verano es bastante inusual por lo que las razones que llevan a entender este incremento van relacionadoas, en primer lugar a la cotización de la materia prima, que ha subido un 12,91% en este periodo; la evolución de los fletes, con una subida del 15,23· en el bimestre pasado y una subida del coste de comercialización del 0,96%, como vemos en el siguiente gráfico elaborado por la OCU:
Estas subidas se sitúan en el límite de lo pemitido y denotan la existencia de un déficit de tarifa que habría que revisar en el mes de septiembre. No hay que olvidar que, para muchas familias, comprar la bombona supondrá un mayor gasto y quienes suelen usar este tipo de combustible son hogares con menos recursos o de zonas en las que escasean las alternativas. No obstante, este precio máximo solo se aplica a la bombona tradicional de butano de 12,5 kilogramos de carga. Aquellas que poseen una tara inferior a 9 kilos o que no tengan una carga entre 8 y 20 kilos tienen el precio liberalizado.
