El Gobierno ha prorrogado hasta el 31 de mayo el plazo para solicitar los préstamos avalados y subvencionados por el Estado para hacer frente al pago del alquiler de la vivienda habitual. El aplazamiento podrá ser ampliado nuevamente, previa propuesta de la comisión de seguimiento, hasta el 31 de agosto de 2021.

El impacto de la pandemia en el mercado de vivienda y, como consecuencia, la vulnerabilidad en los arrendatarios y la incertidumbre sobre el futuro cercano, ha provocado que el Gobierno tome esta medida, en aras de proteger los alquileres. Así, el Boletín Oficial del Estado (BOE) ya recoge la prórroga de los microcréditos hasta el mes de mayo.

Además del plazo de solicitud, el Ejecutivo ha ampliado también lo referente a la formalización de los préstamos hasta el 30 de junio, que también podrá ser prorrogado tres meses más, hasta el 30 de septiembre.

Los créditos pueden cubrir hasta la totalidad del importe de la renta mensual, con un máximo de 900 euros al mes durante seis meses, es decir, un total de 5.400 euros, para aquellos que hayan visto reducidos sus ingresos por el impacto del coronavirus. Los solicitantes contarán con un plazo para devolverlo de seis años, con posibilidad de una prórroga de hasta cuatro años más.

¿Qué requisitos debo cumplir para acceder a los microcréditos?

Entre las condiciones se encuentran que cualquier miembro de la unidad familiar se haya quedado en paro, se encuentre en ERTE, haya reducido su jornada por motivo de cuidados o haya sufrido circunstancias similares que supongan una “pérdida sustancial de ingresos”, según el BOE.

Los requisitos pasan por que los ingresos de la unidad familiar no superen los 2.689 euros mensuales, así como que ninguno de sus miembros tenga un piso en propiedad. El BOE matiza que solo se concederán estos préstamos al alquiler de viviendas completas, excluyendo así acuerdos de subarriendo o alquiler de habitaciones.

Además, el pago del alquiler y los suministros básicos, entre los que se encuentran la electricidad, calefacción, agua corriente, telecomunicaciones y pago de la comunidad, deben suponer al menos el 35% de los ingresos netos de la unidad familiar.

En caso de que se demuestre que el solicitante no cumplía con las condiciones para acceder al préstamo, tendrá que devolverlo junto con intereses y gastos, así como si no lo paga en los plazos establecidos. El BOE también matiza que los microcréditos son compatibles con las ayudas al alquiler.

En este procedimiento, el banco es el encargado de abonar directamente el importe del préstamo al propietario del piso, con el fin de evitar la incertidumbre de un eventual impago del inquilino. Estas entidades no podrán exigir a los clientes la contratación de otros productos, según reza el BOE.

El Gobierno destinó en principio un máximo de 1.200 millones de euros, con una dotación de 112 millones que pagará a las entidades de crédito para sufragar estos gastos e intereses hasta 2031. En el momento en que se agoten estas partidas el Ejecutivo deberá decidir si ampliar la dotación o, por el contrario, paralizar las ayudas.