Iberdrola ha ejecutado la división de su Gobierno corporativo, con el nombramiento de Armando Martínez como nuevo consejero delegado y la permanencia de Ignacio Sánchez Galán como presidente ejecutivo de la eléctrica. Así lo ha comunicado la compañía a la Comisión Nacional de Mercados y Valores (CNMV) tras la reunión del Consejo. El Consejo de Administración de Iberdrola ha acordado separar los cargos de consejero delegado y presidente ejecutivo de la compañía, con el ascenso del hasta ahora director general de Negocios, Armando Martínez, hasta el segundo puesto de la compañía, en sustitución de Francisco Martínez Córcoles.
De la misma forma, el nuevo consejero delegado ha sido nombrado también consejero ejecutivo de Iberdrola, a través del procedimiento de cooptación y a propuesta de la Comisión de Nombramientos. Por su parte, Martínez Córcoles ha puesto su cargo a disposición del Consejo de Administración de la compañía para facilitar los cambios en el sistema de gobernanza de la sociedad, tal y como ha comunicado el órgano a la CNMV este martes en una información relevante relativa a la composición y cargos del Consejo de Administración y de la Comisión Ejecutiva Delegada.
El Consejo ha aprobado este martes separar los cargos de presidente ejecutivo y de consejero delegado de la sociedad y ha aceptado el cese presentado por el propio consejero delegado hasta ahora, Francisco Martínez Córcoles. El directivo ha puesto a disposición su cargo como consejero de la sociedad que, según ha manifestado en la reunión del Consejo, "obedece exclusivamente a facilitar los cambios en la gobernanza de la Sociedad, que consideraba más adecuados en este momento". Martínez Corcóles era uno de los directivos de Iberdrola imputados en el caso Villarejo, cuya causa se ha archivado hace dos semanas, como la del propio presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.
Cambios en el Consejo de Administración de Iberdrola
Por otro lado, el Consejo de Administración de Iberdrola también ha nombrado a Armando Martínez consejero ejecutivo de la sociedad por el procedimiento de cooptación y a propuesta de la Comisión de Nombramientos, con el fin de cubrir la vacante producida por el cese de Martínez Córcoles en su cargo de consejero. No obstante, Martínez se mantendrá en este cargo durante el plazo vigente hasta la celebración de la Junta General de Accionistas de la compañía.
Los puntos del día del Consejo se ha centrado así en el cese de Martínez Corcoles para sustituirle por Martínez y, según el reglamento, que el nuevo consejero delegado pase a formar parte de la Comisión Ejecutiva Delegada de la compañía, precisamente por haber sido nombrado consejero delegado. El nuevo directivo también ha sido nombrado vocal de la Comisión Ejecutiva Delegada de Iberdrola.
El órgano de Gobierno de Iberdrola ha aceptado también el cese de Julián Martínez-Simancas Sánchez como secretario no consejero del Consejo de Administración de la compañía con efectos a fecha 1 de enero de 2023 y, por tanto, secretario no consejero de su Comisión Ejecutiva Delegada, que también habría puesto su puesto a disposición de la compañía. La compañía asegura a la CNMV en su información relevante que el cese de Martínez-Simancas tiene como objetivo "garantizar una adecuada transición".
Martínez-Simanas será sustituido como secretario no consejero del Consejo de Administración de la compañía por Santiago Martínez Garrido, a propuesta del presidente ejecutivo y previo informe favorable de la Comisión de Nombramientos, que se hará efectiva el próximo 1 de enero de 2023. Asimismo, Martínez Garrido será también secretario no consejero de la Comisión Ejecutiva Delegada. El directivo ocupa, hasta el momento, el cargo de vicesecretario primero del Consejo de Administración.
Además de los nuevos nombramientos y del mantenimiento de Galán como presidente de Iberdrola, el Consejo ha aprobado, a propuesta de la Comisión de Nombramientos, que la Comisión Ejecutiva Delegada de la sociedad quede compuesta por seis miembros.
