Food Delivery Brands, grupo de restauración propietario de Telepizza y uno de los más relevantes a nivel mundial, con presencia en 33 países y más de 2.370 establecimientos, ha presentado sus resultados financieros de 2021. A pesar de un escenario macroeconómico complejo como consecuencia de Ómicron, el incremento de los precios de las materias primas y la energía, así como el aumento de las tensiones geopolíticas, que se han intensificado durante los últimos meses, el grupo ha superado sus objetivos para el ejercicio 2021, con un EBITDA ajustado de 49,3 millones de euros.
Tras el primer año de gestión de Jacobo Caller como CEO, el grupo ha cerrado el 2021 superando el impacto de la pandemia y sentando las bases adecuadas para un crecimiento sostenido en el futuro. En cifras, Food Delivery Brands cerró el año con un EBITDA ajustado de 49,3 millones de euros, un 66% más que en el ejercicio 2020, superando las estimaciones comunicadas al mercado, situadas entre 39 y 41 millones de euros. En concreto, el EBITDA ajustado del cuarto trimestre del año 2021 alcanzó los 21,9 millones de euros, un 75% más respecto al trimestre anterior, lo que muestra la recuperación progresiva del negocio, según la compañía.
Las ventas cadena del grupo ascendieron en 2021 a 1.134 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 15,7%, a tipo de cambio constante, respecto al año anterior. La positiva evolución de las ventas se hizo aún más evidente en el cuarto trimestre del ejercicio 2021, en el que se registraron ventas por valor de 317 millones de euros, consolidando la tendencia ya reflejada en los trimestres anteriores.
Crecimiento en España y Portugal
Por mercados, en España y Portugal las ventas experimentaron un crecimiento de más del 8,6% en el cuarto trimestre del año respecto al mismo periodo del año anterior, confirmando la tendencia de trimestres anteriores, pese a la incertidumbre económica e inflación de finales de año. A 31 de diciembre de 2021, el 100% de las tiendas del grupo en Iberia se encontraban abiertas y funcionando con normalidad.
En el resto de Europa, las ventas continuaron con un sólido crecimiento del 10,8% en el último trimestre del año. En el conjunto del ejercicio las ventas del mercado europeo aumentaron un 6,8%, en euros constantes, respecto a 2020 gracias a un entorno menos restrictivo que el vivido en el ejercicio anterior. El 86,9% de las ventas corresponden a Telepizza y Apache Pizza en Irlanda, y el 13,1% a Pizza Hut.
En Latinoamérica también se ha experimentado un fuerte crecimiento respecto al año anterior, según las cifras del grupo. Las ventas de 2021 aumentaron un 27,2% respecto a 2020, con un incremento del 23% en el último trimestre. En este mercado el 11% de las ventas corresponden a Telepizza y Jeno’s Pizza en Colombia, y el 89% a Pizza Hut. Este mayor crecimiento en comparación con el alcanzado en Europa es consecuencia del mayor impacto sufrido en las ventas por la pandemia en la región durante 2020. Con todo esto, la liquidez del grupo a finales del ejercicio 2021 asciende a 58 millones de euros.
Expansión y digitalización
La compañía ha desarrollado un plan de expansión y digitalización muy ambicioso, tanto en Iberia como en Lationamérica. Para ello el grupo invirtió 40,6 millones de euros en 2021, destinados principalmente a aumentar su capacidad industrial, expandir su parque de restaurantes y fortalecer la digitalización de la compañía. En 2021 el número de nuevas aperturas de Food Delivery Brands alcanzó las 143 tiendas, 74 de ellas en el cuarto trimestre. De esta forma, el grupo cuenta ya con un total de 2.374 locales a nivel mundial.
Junto a la expansión de su red, las ventas de los canales digitales están ganando cada vez más importancia en la operativa y contacto con los clientes. De hecho, durante 2021, el 30,3% de los pedidos provinieron de canales digitales, lo que ha supuesto un crecimiento del 28,3% con respecto a 2020 y de un 100,7% con respecto a 2019.
A pesar de las buenas perspectivas de futuro, la compañía sigue muy de cerca los efectos de la presión inflacionaria iniciada en el tercer trimestre de 2021, que se acentúa ahora como resultado de la guerra en Ucrania, para adaptar sus operaciones de forma rápida y eficaz, priorizando la preservación de sus márgenes y la liquidez.