Cepsa ha anunciado el nombramiento de Jacob Schram como nuevo miembro de su Consejo de Administración, a partir del 27 de octubre de 2022. Como consejero Schram aportará su experiencia y asesoramiento en la ejecución de la estrategia ‘Positive Motion’ de Cepsa, cuyo objetivo es convertir a la compañía en líder de la transición energética en España y Portugal durante esta década. Bajo este plan, Cepsa generará más de la mitad de su beneficio operativo en 2030 a partir de negocios sostenibles, que incluyen la movilidad sostenible, biocombustibles como el empleado en la aviación, y el hidrógeno verde.

Schram cuenta con más de 30 años de experiencia ejecutiva en grandes empresas internacionales, incluyendo funciones de consejero delegado en Norwegian Air Shuttle, Circle K Europe y Statoil Fuel & Retail (SFR). Asimismo, también ha ocupado puestos directivos en McDonald’s y McKinsey.

Schram es autor del libro “The Essence of Business” y en 2017 fue nombrado ‘Directivo del Año’ por la Asociación Noruega del Pequeño Comercio de Alimentación. Nacido en Noruega, cuenta con un máster en Economía por la Copenhagen Business School.

La compañía avanza así un paso más allá en la transición energética incorporando a expertos del sector en el seno de su Consejo de Administración. La firma afianza su compromiso con la sostenibilidad de la que ya está haciendo gala a través de distintas iniciativas.

Como la compensación de 55.000 toneladas de CO2 del gasóleo para calefacción que sus clientes residenciales consuman este invierno que equivale a la plantación de 330.000 árboles, la financiación de diferentes proyectos de reforestación y preservación de la masa forestal o la colaboración en distintas iniciativas medioambientales de ámbito nacional.

Positive Motion, es el nombre de la campaña que, en consonancia con los objetivos de la Agenda 2030, quiere ir más allá de las cero emisiones netas, permitiendo a los clientes y a la sociedad avanzar en la dirección correcta (Net Positive).

La compañía ha establecido una clara hoja de ruta para recortar sus emisiones, situándose entre las compañías referentes de su sector. En concreto, en 2030, reducirá sus emisiones de CO2 (alcance 1 y 2) en un 55% respecto a 2019, y aspira a alcanzar cero emisiones netas en 2050. En cuanto al índice de la intensidad de carbono de sus productos (alcances 1, 2, y 3), el objetivo de la compañía es reducirlo entre un 15 y un 20% en 2030.