El verano llega a su fin y nos deja malos datos para el sector de la construcción y del cemento en particular. El cemento ha vuelto a entrar en recesión con caídas cercanas al 3% que se ven especialmente en los últimos días de agosto.
“Los datos del verano confirman la nueva entrada en recesión del sector, muy afectado por la caída de las inversiones en obra pública, que ya se apuntaba en el descenso del consumo vivido desde el inicio de 2016”, ha anunciado Aniceto Zaragoza, director general de Oficemen.
Este miércoles, la patronal de las cementeras ha hecho público el dato de consumo del mes de agosto, así como el balance que analiza las cifras en lo que va de 2016; es decir, que la demanda del cemento ha caído un 2,8% respecto al mismo periodo de 2015.
El acumulado hasta el cierre de agosto es de 7,42 millones de toneladas, 217.000 toneladas por debajo.
Una tendencia desde 2007
Que el consumo de cemento caiga en los meses de verano se ha convertido ya en una tendencia desde que, en el año 2007, viviera sus mínimos. Este año se ha repetido, pese a que en 2014 se habló de un cambio de tendencia.
Según Oficemen, durante julio y agosto en toda España el consumo de cemento ha descendido un 4,3% respecto al verano del año pasado, unas 1,89 millones de toneladas.
