Espejo Público ha contado esta semana con el famoso economista Santiago Niño Becerra como colaborador. En el programa ha aportado detalles sobre su nueva novela Futuro, ¿qué futuro?, donde se abordan problemas a los que nos enfrentaremos en los próximos meses y años.

El economista cree que el Gobierno de España está intentando exculparse de la situación de crisis e inflación actual con el conflicto ruso-ucraniano: "Antes de que el primer soldado ruso cruzase la frontera de Ucrania la inflación en España era ya del 7,4 y cerramos 2021 con una inflación del 6,5%". En su opinión esto lo hubiera hecho cualquier partido político que estuviera en el Gobierno; no es exclusivo del actual.

También repasó los últimos datos del IPC, donde la inflación está actualmente (31 de marzo) a 9’8%, y los comparó con predicciones de otros organismos: “El Banco de España hizo una estimación y dijo que a principios de abril la inflación podría colocarse en un 10%”. Esto equivale a un 11 o 12% en diciembre, según el experto. Estas cifras han generado el resoplido de Susana Grisso, presentadora del programa, que ha añadido que esas números le “espantan”.

Según Niño Becerra, la política “no pinta nada” en la situación económica debido a que es una inflación estructural por falta de productividad y problemas de suministros derivada de la pandemia: “La política aquí no tiene nada que decir”. A pesar de ello, España está peor que otros países europeos porque ya venía de estar peor y la situación actual lo ha potenciado.

Además, ha querido lanzar un pronóstico a largo plazo: “Las próximas décadas van a ser de estabilidad, pero por la zona de abajo; no va a haber hiperinflaciones, ni evoluciones dramáticas en las bolsas, pero aquello de ir al banco a pedir un crédito e ir de vacaciones a las Maldivas... eso se acabó”, ha puntualizado, mientras anticipaba que “la desigualdad va a aumentar mucho, siendo la concentración del capital cada vez mayor”.

Santiago Niño Becerra ya vaticinó otras crisis

El economista ya predijo la crisis de 2008 mucho antes que la mayoría; y no fue su única anticipación exitosa, ya que mientras muchos pensaban que esta recuperación llegaría para 2010, el vaticinó que no sería hasta 2015 (2018 para España).