María Jesús Montero, ministra de Hacienda, presentaba este jueves los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022, que contarán con un techo de gasto en los 196.142 millones de euros, ligeramente por encima de los presupuestos anteriores. Por otro lado, el presupuesto previsto de gastos en el proyecto presentado por el Gobierno asciende a los 458.970 millones de euros para el próximo año, de los que 27.633 millones corresponden a los fondos Next Generation UE.
Después de la presentación pública en rueda de prensa por la ministra de Hacienda, tras ser aprobados en un Consejo de Ministros extraordinario, el Gobierno ha desvelado el documento completo sobre el reparto de los nuevos PGE según las diferentes políticas, donde 6 de cada 10 euros irán destinados a gasto social, tal y como recalcó Montero.
Así queda el gasto de los Presupuestos Generales del Estado
El grueso del gasto de las nuevas cuentas públicas va para gasto social, en morado en el gráfico, con 247.075 millones de euros, donde las pensiones son las protagonistas indiscutibles, mientras en paralelo el Pacto de Toledo discute los cambios en la reforma. Según las cifras del documento de Hacienda, se destinará un total de 171.165 millones de euros de gasto público a asegurar la viabilidad del sistema de pensiones.
El gasto en pensiones supone un 4,8% más que en las cuentas actuales por el aumento del 3% para las pensiones mínimas, no contributivas y para el Ingreso Mínimo Vital, como anunciaba la ministra en los primeros detalles de la medida. Por otro lado, las pensiones contributivas quedarán ligadas a la inflación de los doce meses previos a noviembre de este año, según lo pactado por los agentes sociales en la reforma de pensiones y que ahora se discute en el Congreso de los Diputados.
El capítulo de gasto social se completará con los 22.457 millones destinados a políticas de desempleo, 7.648 millones al fomento del empleo, 6.154 millones a los Servicios Sociales y Promoción Social, 5.434 millones al gasto público en Sanidad, 3.336 millones en transferencias al sistema de la Seguridad Social, 5.023 millones al gasto en Educación 3.295 millones para garantizar el Acceso a la Vivienda y el Fomento de la Edificación, 1.589 millones para Cultura y otros 20.974 millones para otras prestaciones económicas.
Transferencias a las Administraciones Públicas: un 33,5% más para la Seguridad Social
El segundo gran capítulo corresponde a actuaciones de carácter general, con una dotación total de 132.968 millones de euros. Aquí se engloban las transferencias a otras Administraciones Públicas con una dotación de 70.729 millones de euros, 30.453 millones para los servicios de carácter general y 30.175 millones para el gasto en deuda pública.
El tercer capítulo de gasto, en rojo en el gráfico anterior, se destinará a actuaciones de carácter puramente económico, con 51.407 millones de euros previstos. Un capítulo que se divide en investigación civil, con 12.360 millones, infraestructuras (11.841 millones), Industria y Energía (11.316 millones), actividades relacionadas con la Agricultura, Pesca y Alimentación (8.844 millones), Comercio, Turismo y Pymes (2.932 millones), 2.721 millones de euros para subvenciones al transporte y 1.393 millones que quedan reservados para otras actuaciones puramente económicas.
El último gran capítulo de gasto se destinará a los servicios públicos básicos, con una dotación de 24.478 millones de euros, de los que 10.149 millones irán a Seguridad ciudadana e Instituciones penitenciarias, 9.791 millones para Defensa, 2.284 millones para Justicia y 2.254 millones de euros destinados a Política Exterior.
Solo disminuye el gasto destinado a las políticas de desempleo
Todas estas partidas aumentan, en mayor o menor medida, excepto el gasto destinado a las políticas de desempleo, “por la recuperación y la mejora del mercado laboral”, tal y como ha explicado la ministra de Hacienda. Las subidas del gasto público van desde el 3,3% más para el fomento del empleo hasta un 46,3% más en el caso de políticas de acceso a la vivienda y fomento a la edificación, pasando por una mayor transferencia de fondos al sistema de la Seguridad Social, con un 33,5% más de gasto previsto, donde las pensiones tienen especial protagonismo, como se puede observar en la siguienta tabla:
Por otro lado, el documento de Hacienda desvela las transferencias a algunos de los diferentes departamentos del Gobierno. Así, el Ministerio de Defensa recibirá 7.304 millones de euros en gasto público; el de Sanidad 2.828 millones, con un 17,3% menos frente a los PGE actuales; el de Agricultura, Pesca y Alimentación 8.844 millones, un 5,2% más, y el de Consumo recibirá 60 millones de euros, también un 46,7% superior a lo registrado anteriormente.
