El Canal de Suez sufre desde el pasado miércoles un bloqueo global después de que el buque Ever Given quedara atrapado en la vía marítima.

Aunque las excavadoras y demás máquinas se encuentran trabajando desde entonces por tratar de desencallarlo, las consecuencias económicas ya se notan a nivel internacional, por ejemplo, en la subida del petróleo.

La empresa propietario del buque, Shoei Kisen, así como su aseguradora, Evergreen, se enfrentan a demandas millonarias al taponar una de las rutas comerciales más importantes a nivel mundial.

De esta manera, los propietarios de los productos que iban en él y que pueden estropearse por el accidente y los demás barcos –más de 200- que se encuentran detenidos en este momento, podrían reclamar una importante cuantía económica a ambas empresas.

Las propias autoridades egipcias podrían unirse a esta reclamación por los trabajos que han realizado en las últimas horas y por las pérdidas que también pueden sufrir al tener paralizada su principal vía de comercio.

El canal de Suez es una de las rutas comerciales más importantes del mundo. Se estima que más del 10% del comercio global –unos 8.000 millones de euros al día- pasa por ella.

No puede saberse aún con precisión cuánto dinero pueden solicitar las partes afectadas, pero los expertos lo cifran en más de 100 millones de dólares.